Avilés, M. B.

A la tercera va la vencida o eso espera al menos el Belenos, que ataca el próximo domingo su tercera y última oportunidad para lograr el ascenso a División de Honor B esta temporada. El conjunto avilesino se enfrenta al Durango en una elimanatoria a ida y vuelta que comienza en el Muro de Zaro. «A ver si el Belenos echa la raza que tiene que tener en el campo», afirma el técnico del Belenos, Tomás Valledor.

Y es que el entrenador ha echado de menos algo de garra en el equipo en está fase de ascenso y pide máxima concentración y entrega ante el Durango. «Hay veces que tenían que haber dado el do de pecho y no lo hicieron, hay que estar a lo que estás y no todos estaban. Tuvimos el ascenso en la mano y no merecimos conseguirlo», sentencia.

El equipo blanquiazul ya ha quemado dos oportunidades de ascender en sendas eliminatorias ante el Éibar y el Sant Cugat, ahora se enfrenta a un equipo que lucha por no descender de la categoría de plata, todo un reto. «Puede que sea el más difícil de todos. Es un equipo de División de Honor que está en horas bajas y siempre tendrá las ganas y la experiencia de haber estado en la máxima categoría. No será nada fácil dar la sorpresa, pero podemos hacerlo», afirma el entrenador del conjunto avilesino.

Con todo, Valledor cree en las posibilidades de su equipo en esta eliminatoria, como en cada encuentro: «Nunca doy un partido por perdido y éste no va a ser diferente. Tenemos que ser como los espartanos en la película "300", prefiero trescientos que quieran dar todo que treinta mil que no quieran ir a la guerra», afirma el entrenador del Belenos.

El entrenador tiene tres días para pinchar a los suyos y que saquen toda la casta que llevan dentro para lograr dar la sorpresa ante el Durango y dejarse opciones para el partido de vuelta en tierras vascas. El partido se disputará el domingo a las 13.00 horas.

«No es una excusa, contra el Sant Cugar teníamos que haber dado más, pero lo de los árbitros, en Barcelona y en especial aquí, fue muy sospechoso, un sinvergüenza», señala Valledor. Para el técnico, el equipo no estuvo al cien por cien, pero las decisiones arbitrales tuvieron mucho que ver en el resultado. «En Sant Cugat fuimos a ver qué pasaba, cosa que no puede ser, y en dos jugadas malas se nos fue el partido. Con una derrota por 10 puntos hubiesemos estado muy contentos», añade el entrenador.