Madrid, Área 11

El Marino acabó maquillando la derrota ante el flamante campeón del grupo 1, el Castilla. Los de Quirós aprovecharon la relajación del Castilla en los minutos finales y la gran actuación del portero Rafa Ponzo, que evitó la goleada local.

En los primeros compases fue mejor el equipo blanco. No se habían cumplido ni diez minutos de juego cuando el conjunto de Alberto Toril estaba a punto de hacer subir el 1-0 al marcador. La jugada por la banda de Lucas finalizaba con un centro-chut que se marchaba ligeramente desviado por encima del travesaño.

Poco después los locales tenían una nueva ocasión tras otra cabalgada por la banda de Lucas; el balón rematado por Jesé se fue al larguero y el rechace lo desvió Ponzo.

El filial madridista era mejor, controlando el esférico en el centro del campo y llegando con mucho peligro al área asturiana. Así, en el minuto 17, fruto del acoso, llegaba el primer tanto local, por medio de Lucas. Dos minutos más tarde una extraordinaria jugada de nuevo del extremo blanco culminaba con un buen disparo de Joselu que se convertía en el 2-0.

Antes de cumplirse la primera media hora Ponzo evitaba el tercero con una gran intervención a disparo de Joselu.

El Marino, que no había creado ninguna ocasión clara en el primer tiempo, pudo acortar diferencias al inicio de la segunda mitad, pero Sergio Prendes no acertaba en un mano a mano ante el portero local.

Parecía que los de Quirós se habían quitado de encima el dominio local cuando llegó el tercero de los de Toril. Gran jugada por la banda de Joselu, cuyo centro lo remató libre de marca Jesé.

Con ventaja tan clara en el marcador el campeón pareció tomarse las cosas con más calma, lo que fue aprovechado por los de Quirós para encontrar premio a su esfuerzo. Una jugada de Álex Arias estuvo a punto de rematarla Jony cuando se adelantaba a la acción Carvajal, si bien no lograba otra cosa que enviar el balón al fondo de su propia portería (minuto 65).

El encuentro parecía morir con el 3-1 en el marcador cuando en el descuento se produjo una acción polémica que significaría el segundo tanto del Marino. El colegiado pita cesión en el área del Castilla y Jony consigue colocar su disparo entre la muralla de piernas de los jugadores locales para maquillar el resultado con el 3-2 definitivo.