Langreo, P. ANTUÑA

El Langreo visita a un rival fácil a priori. El Nalón está penúltimo en la clasificación a tres puntos de la salvación y no gana desde el pasado 18 de diciembre cuando superó por dos goles a cero al Tuilla. Desde entonces, el conjunto de Olloniego ha perdido seis partidos y sumado dos empates. Una situación que propició que la directiva optase por un cambio y que Carlos García Baquero asumiese la preparación del Nalón.

Aunque precisamente este tipo de partidos ponen en un compromiso a los equipos de la zona alta. Un partido «trampa» en el que una derrota o un empate duele más si cabe. Y si no que se lo digan al Tuilla. El conjunto «dinamitero» estaba superando los registros de la temporada anterior, pero al perder con el Nalón encandenó una racha en la que únicamente ganó un partido de cinco disputados.

El entrenador del Nalón, Carlos García Baquero, estuvo dirigiendo en gran parte de la temporada a las categorías inferiores del Lenense, hasta que el conjunto de Fumea le llamó para revertir la situación. Ahora espera dar problemas al Langreo. «Tendremos que estar muy juntos en el campo y luchar mucho durante todo el partido. Nosotros no renunciamos a nada, porque si queremos salvarnos tenemos que asegurar todos los puntos que disputemos en casa. Da igual el rival que sea», analiza el técnico del Nalón.

Y aunque sea un partido complicado, con rivales con un potencial distinto, a juicio de Baquero, el Nalón debe aprovechar sus oportunidades. «El campo es de dimensiones reducidas y habrá que aguantar y buscar balones largos para optar a segundas jugadas. Es una de las pocas cosas que podremos hacer», comenta.

El técnico del Nalón estuvo el pasado domingo viendo al Langreo en Ganzábal. «Jugaron uno de los peores partidos de la temporada y aun así ganaron. Eso demuestra mucho el nivel de su plantilla y el acierto del que disponen. Hace un fútbol muy directo y será un partido difícil», relata Carlos García Baquero.