La pasada primavera Honorino Montes cumplió 90 años. Y aunque lleva una década sin acudir a Ganzábal sigue sufriendo como el primer día que empezó a seguir al fútbol langreano. Primero con Racing Club Langreano de Sama y después con el Unión Popular de Langreo. De este último puede presumir de ser el socio número uno, además de haber formado parte de la directiva y ejercer el cargo de presidente. Una tarea que le ha permitido vivir el fútbol desde dentro y vibrar durante los años dorados del fútbol en el concejo de Langreano.

De todo este tiempo, Montes guarda dos recuerdos especiales. El primero de ellos la fusión. «Fue un éxito deportivo y social. Unir dos clubes y dos ciudades. Esa unión supuso que Sama y La Felguera pudiesen estar comunicadas como lo están hoy en día», analiza. El 4 de julio de 1961 se formalizaba la fusión del Racing Club Langreano y el Círculo Popular de La Felguera en el salón de plenos del Ayuntamiento de Langreo, con Alfonso Argüelles Eguíbar de alcalde. José Antonio Coto Álvarez era el presidente del Círculo Popular de La Felguera y Honorino Montes el del Racing Club Langreano de Sama. El primero de ellos se quedó con la presidencia del recién nacido Unión Popular de Langreo.

Se producía entonces el debut del conjunto azulgrana en la categoría de plata. Aunque se tenían puestas muchas expectativas en aquel proyecto, los buenos resultados sorprendieron a todos. Y aquí llega el segundo gran recuerdo de Montes. En apenas diez meses de vida del Unión Popular de Langreo se consiguió el ascenso a segunda división. Lo hizo tras finalizar la liga de tercera en primera posición. En las eliminatorias por el ascenso, los unionistas superaron al Europa de Barcelona en el partido de desempate en Burgos; y después los azulgranas conservaron su renta en Béjar en el partido de vuelta para conseguir la hazaña. «Hicimos una gran temporada. Nos aprovechamos de que había dos equipos muy buenos en el concejo y al juntarlos nos quedamos con lo mejor. Quedamos campeones y una promoción muy igualada. Además, tuvimos suerte de que conocíamos al presidente del Burgos y nos regaron el campo para el partido de desempate. Eso nos favoreció y conseguimos esa hazaña de debutar con ascenso», recuerda Honorino Montes.

El Unión Popular de Langreo enlazó seis temporadas consecutivas en segunda, hasta que una reestructuración de la categoría les hizo volver a tercera. Las claves del éxito: una buena planificación y un respaldo popular. «El principal problema de las directivas actuales es que ofrecen más de lo que pueden dar. Se quiere pagar a los futbolistas por encima de las posibilidades y luego acaban como acaban los clubes. En mi época de directivo del Langreo teníamos más de 5.000 socios y con aficionados de toda la comarca del Nalón. Ahí está una de las claves para recuperar el Langreo: hay que volver a enganchar a la afición para volver a hacer un equipo grande, aunque recuperar esos años será muy complicado», afirma Montes.