«Tengo ganas de disputar minutos. Hace casi un año que no juego un partido». Raúl Domínguez aguarda con paciencia su turno para ganarse un sitio en el equipo. Lo hace en un año en el que, presumiblemente, la sombra de Juan Pablo y Cuéllar será más alargada que nunca. El guardameta cántabro pudo compaginar las llamadas del primer equipo con apariciones en el filial durante las últimas campañas. Sin embargo, en la presente ha dado el salto para quedarse. Tiene ficha profesional y, a sus 25 años, se ha dado por cerrada su etapa de formación. Las lesiones de sus dos competidores le abren la puerta para ser titular, esta tarde, ante el Lealtad.

«La última vez que jugué fue en enero, con el filial. Nos visitaba el Rayo Vallecano B y, a partir de ahí, firmé la ficha con el primer equipo y me quedé arriba», recuerda Raúl Domínguez. Fue el inicio de una larga sequía de minutos que se extiende hasta la actualidad. La fuerte competencia con la que vuelve a encontrarse en la portería del Sporting no mina su confianza. El cántabro desestimó salir cedido este verano y decidió apurar su último año de contrato en Mareo. Tiene claro que el reto es complicado, pero no renuncia a dar la sorpresa.

«Nunca puedes dejar de trabajar porque no sabes cuándo te va a tocar jugar», asegura el rojiblanco, que se encuentra totalmente repuesto de la lesión que le impidió entrenar con normalidad durante los primeros días de la pretemporada. Raúl Domínguez cree que el amistoso ante el Lealtad puede servirle de escaparate para devolverle la confianza a Manolo Sánchez Murias. El técnico gijonés le dirigió la pasada campaña en el filial y ha optado por su continuidad en el primer equipo como alternativa para la portería.

«Manolo me llamó durante las vacaciones para decirme que contaba conmigo. Me ha tenido media temporada en el Sporting B y sabe lo que puedo aportar, tanto a él como al equipo», explica. El de San Román de Cayón cree que el amistoso en Villaviciosa «puede ser un buen test. Tengo muchas ganas de que llegue para poder volver a jugar».

Manuel Sánchez Murias no ha descartado que Cuéllar pueda sumarse a la convocatoria para medirse al conjunto negrillo. En el caso de que el emeritense entre finalmente en la lista, se quedaría fuera Dennis. El canterano lleva varios días entrenándose con el primer equipo para suplir a los guardametas lesionados. La idea de Manuel Sánchez Murias es desplazar a dos porteros, y repartir cada parte del partido entre cada uno de ellos.

«Sé que es complicado hacerse con un puesto en el equipo, pero voy a luchar por conseguirlo», asegura Raúl Domínguez, que llegó a debutar en Primera División hace dos temporadas, en la visita al Rico Pérez. Desde que llegara a Mareo en el 2008, el cántabro ha protagonizado una progresión que se encuentra ahora ante una de las fases más exigentes de su carrera.