El técnico del Avilés, Chiqui de Paz, ya conoce bien al Real Madrid C, el rival del próximo domingo en Valdebebas a partir de las 12:00 horas. «Es un equipo que presiona mucho y espectacular físicamente, trata bien el balón y su mayor peligro es el asfixiante ritmo que nos va a meter durante todo el encuentro». De Paz quiere aprovechar el que los suyos están con la moral alta, «aunque con los pies en la tierra», después de enlazar dos victorias ante el Zamora y el Fuenlabrada para sumar los tres puntos en Madrid. «Vamos con la idea de no cerrarnos atrás, de ir a por el partido desde el principio», adelantó.
El encuentro será retransmitido en directo por Marca TV desde el campo número 7 de la ciudad deportiva de Valdebebas (Madrid), que es de césped natural. Las entradas cuestan 10 euros para adultos y 5 euros para los niños.
El segundo filial madridista, que al igual que el Avilés compró la plaza en Segunda B el pasado verano, aún no conoce la derrota tras empatar a uno en Mieres y en Zamora, y ganar (2-1) al Leganés (uno de los favoritos al ascenso) en Valdebebas. Un buen inicio de temporada que no sorprende al técnico blanquiazul dada la calidad de sus jugadores. «Todos fueron internacionales en las categorías inferiores y con 20-22 años tienen un espléndido futuro. El ochenta por ciento de esa plantilla estará jugando dentro de tres o cuatro años en Segunda o en Primera, y futbolistas como el portero Pacheco, el centrocampista Belima, el central Derik y el delantero brasileño Bruno van a dar que hablar muy pronto. Aún están en periodo de formación pero son muy peligrosos», insistió.
Los blanquiazules, según su entrenador, van a oponer al Real Madrid C «una ilusión enorme, un ritmo de juego tan alto como el suyo, o más, y una predisposición a ganar absoluta. Vamos dispuestos a dificultarles muchísimo las cosas con nuestras armas y estoy seguro de que les vamos a hacer daño. Es un poco recuperar el espíritu del partido de Zamora, de apretar al rival, entregarse al máximo y tener acierto cara a la portería rival», explicó.
La principal preocupación del técnico es su equipo y como entren los jugadores blanquiazules en el partido. «Eso va a marcar el resto del encuentro. Si nosotros empezamos bien, con confianza y si no encajamos pronto un gol tendremos mucho andado», señaló.
Y es que De Paz no quiere que el equipo repita los errores cometidos en el debut liguero contra el Oviedo, un partido en el que los hombres del Avilés salieron maniatados y un tanto condicionados por el nombre del rival lo que les llevó a encajar muy pronto el primer gol (minuto 6), una circunstancia que marcó el resto del choque porque, aunque el equipo mejoró en la segunda parte, ya fue imposible remontar. En Zamora y ante el Fuenlabrada en el Suárez Puerta, los avilesinos salieron con precauciones defensivas para evitar el verse por detrás en el marcador y es probable que en Valdebebas repitan táctica.
El entrenador del Avilés valoró muy positivamente el papel desempeñado por los jugadores del filial en la consecución del trofeo del Santísimo Cristo de Candás el pasado miércoles. Los avilesinos se llevaron el trofeo a los penaltis después de concluir el partido con empate a cero. «Lo mejor fue el comprobar que tenemos a gente en el filial que puede ayudarnos mucho en el primer equipo», comentó.
