El Oviedo hizo lo justo para llevarse los tres puntos ante el Alcalá. A los azules les bastó una jugada de estrategia en la primera mitad, en un lanzamiento de córner que remató Aitor Sanz, un gol en una jugada de contraataque de Manu Busto, tras un espectacular remate de Aquino que pegó en el larguero, y un remate de Casares a dos minutos del final para lograr la victoria ante un Alcalá que siempre plantó cara y que además tuvo claras ocasiones para ponerse por delante en el marcador, en especial en el tramo inicial del partido, pero lo evitó un acertado Dani Barrio.

A los azules les costó entrar en el partido, pero sin hacer un gran fútbol supieron llevar el ritmo y el control del juego, aunque les faltó mayor presencia en el área rival .

Los tres puntos permiten a los oviedistas mantenerse firmes en el Tartiere y asentarse en la zona alta de la clasificación. Ahora son segundos.

El entrenador del Oviedo introdujo dos cambios con respecto al once inicial que jugó el pasado miércoles en la Copa del Rey ante el Prat. Manu Busto ocupó la posición del sancionado Cerrajería, mientras que Cervero suplió a Oscar Martínez en el eje del ataque. El Alcalá entró mejor en el partido que el Oviedo. Los madrileños, sin complejos, se fueron con descaro al ataque desde el primer minuto y prueba de ello es que apenas habían transcurrido los minutos de tanteo y ya habían creado dos situaciones de peligro ante la portería de Dani Barrio. La primera de ellas en un remate de Perea, el jugador con mayor presencia del Alcalá, que sacó con apuros Dani Barrio sobre la misma línea de gol y un minuto después, en el cuatro, el propio Perea no llegó en el segundo palo a un prolongación de su compañero Tello.

El Oviedo, quizás sorprendido por la salida de los madrileños, tardó en reaccionar. Los azules tuvieron muchos problemas en la elaboración y apenas pudieron dar continuidad al juego. La presión del Alcalá aumentó las dificultades de los azules para salir con claridad desde atrás y los sucesivos errores en los pases impidieron que el equipo tuviese profundidad y presencia en el área rival.

Un centro chut de Aitor Sanz, que llegó mansamente a las manos del portero Juancho, fue la única aproximación con peligro de los azules en la primeros 25 minutos.

En el tramo final de la primera mitad, el Oviedo intensificó su presencia ofensiva, con más ganas que acierto, pero logró que los madrileños diesen un paso atrás. En el minuto 27 Cervero remató de cabeza un centro de Casares desde la derecha, en la que era la mejor ocasión de los azules, pero el Alcalá respondió con un disparo de Tello que Dani Barrio envió con apuros a córner.

Con el juego igualado y las mejores ocasiones para los visitantes, el Oviedo logró adelantarse en el marcador tras un rechace aprovechado por Aitor Sanz en un saque de esquina botado por Manu Busto, acción que fue protestada por los visitantes al entender que se había producido una falta previa al remate del centrocampista azul.

Con la ventaja en el marcador, el Oviedo lo siguió intentando, pero las oportunidades fueron escasas. La única a destacar fue un disparo de Pascual, en el minuto 40, que el portero Juancho envió con apuros a córner.

Los inicios de la segunda mitad mantuvieron la misma tónica, aunque el Oviedo tuvo mayor presencia ofensiva, mientras que el Alcalá seguía dando la cara. Los azules gozaron de una clara ocasión en un remate de Cervero de cabeza, a pase de Manu Busto, pero el balón se marchó por encima del larguero, en el minuto 58.

Por su parte, el Alcalá respondió con dos claras ocasiones de Montero, la primera de ellas en un remate de cabeza que atrapó Dani Barrio y la segunda en un disparo que salió alto.

El Oviedo mató el partido al contraataque. En una rápida salida desde atrás el balón le llegó a Aquino que sin pensárselo disparó a portería desde poco más allá de la mitad del campo. El balón pegó en el larguero y Manu Busto, que seguía la jugada, envió el rechace a la red.

Con el partido encarrilado, los locales tuvieron sus mejores minutos, circulando bien el balón y creando espacios ante un Alcalá que encajó el duro golpe y bajó los brazos.

Los azules aumentaron su renta con el tercer gol, obra de Casares al rematar un centro desde la izquierda de Cantero. El Oviedo cerraba así un partido en el que fueron de menos a más ante un buen Alcalá que le puso las cosas muy difíciles, en especial en la primera parte en la que fue mejor y dispuso de ocasiones para adelantarse en el marcador.