Florentino Pérez, presidente del Madrid, presenció el choque entre el filial blanco y el Oviedo desde el palco del campo número 7 de Valdebebas. El presidente blanco acompañó a Antonio Mijares, secretario del consejo de administración del Oviedo, durante el partido. Florentino Pérez se mostró cordial con la delegación oviedista a la que preguntó cómo marchaban las cosas tras la ampliación de capital y se interesó por la llegada de Carlos Slim al club azul.

Pérez hizo gala de buena memoria al recordar su visita al Tartiere en el primer año de mandato en el Madrid. El duelo de 2001 acabó con empate a uno, un resultado que empujaba a los azules a Segunda. Florentino aseguró que siempre le había quedado esa espina clavada con el descenso del Oviedo.

Al final del choque, unos aficionados azules se acercaron al presidente del Madrid, que rehusó hacer declaraciones, para hablar con él y éste les confesó que estaba «deseoso de que suba el Oviedo». Aitor Karanka también se acercó a seguir la primera parte.