Representante del Grupo Carso

<arturo elías >

Oviedo, Nacho AZPARREN

Son las 10 de la mañana en México y Arturo Elías hace un descanso en su apretada agenda para conocer cuál será el primer peldaño que deba encarar el Oviedo en su intento de regresar al fútbol profesional. «Albacete», le comunica una voz al otro lado del teléfono desde España. «Me acaba de llamar Toni Fidalgo para decírmelo», explica Arturo Elías a LA NUEVA ESPAÑA antes de hacer su valoración personal del final de la temporada regular y el inicio del «play-off», la batalla por la que Carlos Slim se decidió a invertir dos millones de euros en el Oviedo.

-El Albacete será el primer rival en la fase de ascenso. ¿Qué le dice ese nombre?

-Que es un equipo con pasado en Primera División, como nosotros. El Albacete no es un equipo cualquiera, tiene tradición. Debemos tener mucho respeto. Además he leído que Andrés Iniesta es el máximo accionista, ¿no? Lo mejor es que no puede jugar contra el Oviedo (risas).

-El «play-off» comienza en el Tartiere.

-El sorteo dice que debemos jugar el primer partido en Oviedo y luego en Albacete, lo que no es ninguna ventaja; yo prefería que fuera al revés, pero en realidad para subir tienes que ser capaz de imponerte en todas las situaciones. Este equipo es capaz de hacerlo, yo confío en él.

-¿Cuál es la receta para encarar esta fase con éxito?

-Necesitamos un equipo sólido y tener confianza. Jugar el «play-off» es muy diferente a hacerlo en la Liga regular. Es básico que el equipo se comporte de una forma inteligente y me consta que tanto el cuerpo técnico como los jugadores lo son.

-Al quedar tercero, el Oviedo debe encarar el camino más largo.

-No haber quedado primeros de grupo complica un poco más las cosas, está claro, pero ahora no toca mirar hacia atrás sino encarar el futuro con optimismo. Debemos derrotar a tres equipos para subir a Segunda División, solo hay que pensar en eso.

-¿Se le verá por España en el «play-off»?

-Aún no, espero acudir más tarde porque confío en que el Oviedo siga avanzando. Para mí es imposible estar las seis próximas semanas en España y muy complicado si tengo que ir y volver cada semana así que pospondré mi viaje para la última eliminatoria. Así podré celebrar el ascenso con todos los oviedistas.

-¿Cómo ha visto el tramo final de la competición?

-Aunque parezca poco importante haber terminado con victorias yo sí veo básico llegar al «play-off» con una dinámica de triunfos. Sobre todo a efectos anímicos. El ambiente en el vestuario es trascendental a la hora de encarar una fase de ascenso y ganar al Marino y al Sporting B es una buena ayuda para llegar con más optimismo a lo más decisivo.

-Desde su experiencia en el fútbol, ¿qué le diría a los jugadores del Oviedo antes de iniciar el «play-off»?

-Que se tomen cada partido con mucha inteligencia y calma. No deben pensar más allá del Albacete.

-El consejo pondrá precios populares para fomentar que el estadio se llene.

-Hay un elemento básico en las tres eliminatorias: el Tartiere. Me gusta mucho que se haya decidido bajar los precios. Necesitamos 25.000 espectadores este domingo que apoyen con todo al equipo. Si el Grupo Carso está en el Oviedo es por el poder de su afición y sé que ahora no va a fallar a su equipo. 25.000 aficionados pueden marcar la diferencia en una eliminatoria. La afición también juega.

-¿Qué valoración hace de la temporada, al margen de lo que ocurra en la fase de ascenso a Segunda?

-El año es bueno, hubiera sido óptimo si hubiéramos acabado en el primer puesto, pero no debemos darle más vueltas. Hay que derrotar a tres equipos. Y este Oviedo va hacia adelante.

-El consejo mantiene su intención de finalizar su mandato el próximo 30 de junio. ¿Ha pensado en alternativas?

-No es el momento. Ahora solo toca concentrarnos en el Albacete, en el partido de este domingo. Luego ya se verá.