Los mismos síntomas y el mismo diagnóstico que hace dos años. Cristian Bustos sufrió otra crisis epiléptica en julio de 2011. El alicantino cayó desplomado en las instalaciones de A Madroa, campo de entrenamiento del Celta. La por entonces intervención del doctor Juan José García Cota, jefe de los servicios médicos del conjunto vigués, resumió lo que también pudo verse en ayer Mareo. «Asistimos a Cristian Bustos a pie de campo, recuperando la ventilación normal con una recuperación progresiva del estado neurológico, aunque con una fase posterior de desorientación, momento en el que decidimos trasladarlo al Hospital de Fátima», declaró el facultativo del Celta. Cota explicó, después de que el futbolista fuera hospitalizado, y a la espera de su evolución, que el jugador se encontraba «estable y el tac cerebral al que fue sometido no desvela mayores alteraciones, por lo que no esperamos mayores problemas». Un pronóstico que se ajusta al realizado a última hora de ayer por el Sporting, después de que, sobre las siete de la tarde, Bustos recibiera el alta. Tras el desvanecimiento de Bustos en Mareo, los servicios médicos del Sporting se pusieron en contacto con los del Celta para informar del estado del jugador, ya que el alicantino está en condición de cedido por el cuadro vigués. Al mismo tiempo, se compartió el historial del jugador, así como el tratamiento que siguió en la anterior ocasión. Este tipo de cuadros, que cuentan con numerosos precedentes en el mundo del fútbol, no suele impedir la práctica deportiva.