Roberto Robles

"¿Si el Oviedo gana los dos partidos que le quedan cree que se meterá en el play-off?", se le preguntó a Roberto Robles en la rueda de prensa posterior a la victoria en Ferrol. El técnico se tomó su tiempo antes de contestar. Reprimido el impulso inicial de mostrar públicamente sus cálculos, optó por un discurso menos arriesgado. "Pienso en el próximo entrenamiento. Pensar más allá es un error", contestó el entrenador azul.

Los cálculos dentro del oviedismo son sencillos: el equipo debe ganar los dos partidos que le restan en el Tartiere para seguir vivo. Aun así, podría no bastar, pero sí parece que puede ser suficiente. No se llegarían a las cábalas sin haber logrado tres valiosos puntos como los de ayer en A Malata.

Para Robles, el encuentro ensalzó las mejores características de los suyos. "Estoy orgulloso de este equipo y la afición también lo debe estar. Se han visto las sensaciones que quiero de este equipo", comentó sobre el partido despachado ante un rival directo.

Para el técnico, "creamos muchas dificultades al rival por medio de los robos. Ellos tienen la variante de jugar directo a Barreiro, un gran delantero. A partir de ese planteamiento crecimos". - incidió en su análisis. "En la primera mitad llegamos, pero sin tirar, algo que me preocupaba, pero en la segunda mejoramos, tuvimos una mejor dinámica de juego. Disfrutamos de dos ocasiones y el penalti", explicó. "Los dos equipos presionábamos mucho. Si enlazabas tres pases superabas la presión y tenías ocasiones. No hubo muchas ocasiones porque los dos equipos estuvieron correctos en las transiciones defensivas. Los dos fuimos a por el partido", añadió.