"Lo que quiero es jugar, no me importa en qué posición". Esta es la declaración de intenciones de Imanol Vergara, uno de los nuevos fichajes del Marino de Luanco para esta próxima temporada, que fue presentado en la mañana de ayer.

Imanol, de 25 años y natural de Avilés, se formó en las categorías inferiores del Real Avilés, donde fue una de las perlas más codiciadas de la escuela de la Toba. En edad de juvenil fichó por el Sporting de Gijón, en el que tuvo un infructuoso paso por su filial. Ceares, Avilés y Cudillero fueron sus siguientes destinos, siendo este último donde mostró su mejor nivel.

Con cinco goles y doce asistencias, la temporada del avilesino no pasó desapercibida para otros clubes de la categoría de bronce. "No hablé personalmente con ninguno de ellos, me consta que sí hubo equipos que se pusieron en contacto con el Cudillero, pero mi primera opción siempre fue el Marino", relataba el jugador.

Tras cuatro años en Tercera, Vergara vuelve a Segunda B "siendo un jugador más maduro y que quiere aprovechar las oportunidades que no me dieron en el pasado". El mediocampista ofensivo aún no ha hablado con el entrenador José Luis Quirós para saber cuáles son las intenciones que tiene a la hora de incorporarle en su esquema. "Me desenvuelvo mejor en cualquiera de las tres posiciones de la media punta y, si puedo elegir, prefiero hacerlo en el centro".

A Imanol le ha tocado vivir una de las caras más oscuras del fútbol, los impagos. La pasada temporada el Cudillero adeudó a él y todos sus compañeros varias nóminas que aún no saben si cobrarán. En Luanco confía que esta lamentable situación no se repita "porque sé que el Marino es una entidad seria en lo económico. Siempre se dice que este club es una familia, y esta mañana he tenido la oportunidad de conocer a la mayoría de empleados, y la verdad que son los primeros que te tienden la mano ante cualquier tipo de problema".

En Miramar volverá a coincidir con el que fue su compañero la pasada campaña Iván Prendes; además de con Boris, compañero en el Real Avilés, y Omar Álvarez, amigo personal. "No llega a ser algo determinante a la hora de fichar por un equipo, pero sí ayuda saber que llegas nuevo a un sitio y, al menos, conoces y tienes relación con alguien" apuntaba el jugador.

Hoy se cierra el capítulo de presentaciones para esta semana con la de Iván Prendes, que tendrá lugar en el estadio de Miramar a partir de las 11 horas.

Naya, muy cerca

Sigue el trajín en la oficina de Luis Gallego. Las negociaciones entre el Marino y el jugador José Antonio Sánchez Naya están muy avanzadas. El ariete gijonés, que el próximo octubre cumplirá 25 años, estaba pendiente de una oferta del fútbol boliviano que parece no haberle convencido. De esta manera, y salvo que las negociaciones con Bolivia den un giro de 180 grados, Naya vestirá la camiseta azulona la próxima temporada.

El delantero zurdo se encontraba sin equipo tras dejar el Caudal de Mieres, al que llegó en la segunda vuelta de la pasada campaña tras un infructuoso paso por el fútbol kuwaití. En el conjunto de la Cuenca no contó con la confianza del entrenador Miguel Ángel Álvarez Tomé, por lo que sólo disputó 62 minutos en los que no pudo anotar ningún gol. Eso sí, la temporada anterior fue uno de los protagonistas de la campaña del Real Avilés. En el conjunto avilesino anotó 36 goles en dos temporadas.

Naya había pasado antes por las filas del Tuilla, Burgos, Salamanca B, Lealtad y Gijón Industrial.