El piloto alemán Nico Rosberg (Mercedes) ha conseguido la 'pole position' del Gran Premio de Hungría, undécima prueba del campeonato del Mundo de Fórmula 1 que se celebra en Hungaroring, tras firmar el mejor tiempo por delante de Sebastian Vettel (Red Bull) y de Valtteri Bottas (Williams), mientras que Fernando Alonso (Ferrari) fue quinto.

Así las cosas, el líder del Mundial suma la sexta 'pole' de la temporada y al igual que en Alemania tendrá una oportunidad perfecta para ampliar la ventaja en la clasificación general con Lewis Hamilton (Mercedes), que volvió a quedarse fuera de la Q1 tras sufrir un incendio en su motor.

Hamilton (Mercedes) saldrá desde el 'pit lane' este domingo, toda vez que en la calificación de este sábado ha sufrido un incidente durante la Q1 que ha obligado a cambiar el chasis de su monoplaza, algo que también le ha ocurrido al danés Kevin Magnussen (McLaren). Hamilton, segundo clasificado en el Mundial de Pilotos, debería salir desde la última fila tras el incendio de su motor en la Q1. Sin embargo el de Mercedes deberá buscar una estrategia diferente a la del resto para tratar de remontar y no ceder más puntos con su compañero de equipo y líder del Mundial, el alemán Nico Rosberg.

La Q3 se convirtió en un quebradero de cabeza para los pilotos. La lluvia apareció en el circuito pocos minutos antes de que el semáforo se apagara y todos los monoplazas trataron de dar una vuelta rápida con los neumáticos blandos antes de que el asfalto se mojara completamente.

Sin embargo, Rosberg fue el primero en comprobar que las gomas de seco no servían para dar una vuelta rápida al salirse en la primera curva del trazado, aunque peor fortuna tuvo Kevin Magnussen (Mclaren), que no pudo evitar el accidente en el mismo giro, algo que obligó a parar la sesión durante cinco minutos.

Con el reloj detenido el asfalto tuvo tiempo para secarse y los pilotos volvieron a montar los neumáticos de seco. Vettel trató de acabar con la hegemonía de Mercedes y marcó el mejor tiempo a falta de un minuto para el final, pero de nuevo apareció Rosberg para mantener la hegemonía de la marca estrellada en el Mundial.

Por detrás, el Williams de Bottas volvió a meterse entre los tres primeros seguido de cerca por un Daniel Ricciardo (Red Bull) que fue cuarto, mientras que Fernando Alonso consiguió la quinta plaza y se situó por delante de Felipe Massa (Williams), que partirá desde la sexta posición.

La sorpresa de la jornada llegó en la primera tanda de la clasificación y de nuevo tuvo a Lewis Hamilton como protagonista. Tras sufrir un problema con los frenos en Alemania que le hicieron estrellarse con los muros y que le relegó a la vigésima plaza, Hungría no fue diferente para el británico.

El de Mercedes, que llegaba a un trazado de Hungaroring en el que ha vencido en cuatro ocasiones, no pudo mantener su idilio con el circuito magiar y volvió a ver como la dudosa fiabilidad del Mercedes le dejaba fuera de la sesión, esta vez con problemas en el motor.

Tras la sesión, el piloto inglés se mostró incrédulo por los continuos fallos de su monoplaza. "No puedo creerlo. No sé qué ha pasado en el coche, sólo sé que empezó a salir fuego e intente volver al 'box' para arreglarlo, pero no pudo ser", aseguró.

"No sé qué decir, intentaré dar el máximo en la carrera y por lo menos espero salir desde el final e intentar algo similar a lo que hice en Alemania", sentenció el de Mercedes, que saldrá lejos de las dos primeras plazas por cuarto Gran Premio consecutivo.

No estará sólo el campeón del Mundo de 2008 en la retaguardia de la parrilla, pues un error de estrategia en el equipo Ferrari hizo que Kimi Raikkonen (Ferrari) viera desde el garaje como Jules Bianchi (Marussia) mejoraba su tiempo y relegaba al finlandés a la decimoséptima plaza, dejándole fuera de la Q2.