El Sporting mejor Sporting de los últimos años en lo deportivo no encuentra respaldo en las otras facetas del club. La situación económica amenaza con colapsar la entidad, que debe dinero a futbolistas, empleados, proveedores y administraciones. La paz social se ha hecho añicos y el sector crítico con la gestión del consejo gana adeptos a medida que aumentan las noticias negativas. La única salida a la situación actual pasa por completar el proceso de venta, en el que no parece que se registren grandes avances, a pesar de la irrupción de un cuarto posible comprador (aún en fase de información) o la financiación externa. El club tiene abiertas varias vías de negociación para conseguir un préstamo de alguna entidad financiera, pero el gran inconveniente son las garantías. El único patrimonio con el que cuenta el Sporting son sus futbolistas y no todos, ya que algunos han sido puestos ya como garantía de préstamos anteriores o de aplazamientos con la Agencia Tributaria.
Una tercera vía sería una sentencia favorable del Tribunal Económico Administrativo Central, ante el que el Sporting recurrió el rechazó de Hacienda a aceptar el pago de la deuda con bienes de interés cultural. Hace ya más de un año que fue presentado el recurso sin que se haya producido el fallo. En cuanto al proceso de venta, parece que el problema es la falta de financiación de los inversores.
