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Los azules afrontan la vuelta del play-off

El Oviedo teme una encerrona

El malestar en el club azul es evidente desde que la Federación permitió al Cádiz fichar para sustituir al lesionado Andrés Sánchez - La medida con Garrido es la gota que colma el vaso y la posibilidad de que el partido no sea televisado aumenta la inquietud

La anulación de la cartulina amarilla a Garrido por parte del Juez Único del Comité de Competición cayó como un jarro de agua fría en el Oviedo. El Cádiz podrá contar con un futbolista fundamental en su esquema en una decisión que ha causado extrañeza. Aunque el malestar en el club azul ya era evidente desde hace algunos días, prácticamente desde que Cádiz y Oviedo quedaran emparejados. Han sido pequeños detalles que fueron creando una situación incómoda. Los seguidores azules se mostraron ayer contrariados en las redes sociales por la decisión y en el club existe una sensación similar por lo que ha ocurrido en los últimos días y lo que puede suceder en el encuentro de vuelta.

01Un fichaje fuera de plazo hilando muy fino .

El primer punto de sospecha llegó con la incorporación exprés de Prada para la disputa del play-off. Desde el Oviedo se vio la situación con cierta indignación. La reglamentación es clara al respecto a la hora de permitir la incorporación de jugadores fuera del plazo de fichajes. Son dos las condiciones básicas, según recoge el artículo 124 del reglamento de la federación. En primer lugar, se exige que la lesión tenga "un periodo de inactividad por tiempo superior a cinco meses". Ese fue el plazo comunicado por el Cádiz como baja por la rotura de peroné de su lateral. La segunda obliga a comunicar el propósito de solicitar la baja con "al menos diez días de antelación a la fecha de solicitud de la citada baja federativa. A fin de que pueda efectuarse las alegaciones que considere oportunas". La Federación comunicó al Cádiz que podía cubrir la baja de Andrés Sánchez menos de 24 horas después del incidente.

02 Alberola Rojas, un árbitro con escasa experiencia.

La Federación hizo público el nombre del colegiado a comienzo de semana y en el club carbayón llamó la atención la edad del árbitro. Alberola Rojas es uno de los colegiados con más futuro en el arbitraje pero sus 23 años parecen un hándicap a la hora de dirigir un partido de tal envergadura. Una persona del club azul se quejaba amargamente de que al Tartiere hubiera venido un experimentado árbitro: Alonso Vicente Moral, de 32 años. Sin embargo, éste es uno de los aspectos que menos preocupan. Los informes que tiene el Oviedo sobre Alberola Rojas hablan de un colegiado con personalidad y se confía en su capacidad, aunque extrañe la diferencia de perfil entre los dos árbitros elegidos.

03 El inesperado perdón del Juez Único a Garrido.

Fue la gota que colmó el vaso. La noticia del perdón a Garrido despertó la indignación en el club azul que pronto se puso manos a la obra para ver cómo reaccionar. Hasta la fecha había aguantado con los movimientos del Cádiz pero lo de Garrido superó el límite. De ahí el comunicado y el anuncio del recurso.

Vicente Moral explicó en el acta que había sacado la segunda amarilla al cadista por "encararse y empujar de forma temeraria a un adversaria sin estar el balón en juego, derribándole", pero el Juez Único echó por tierra el argumento tras visionar las imágenes.

La baja de Garrido significa una pérdida importante en el esquema de Claudio y en el Oviedo se considera que parte del balance defensivo de los gaditanos recae sobre los hombres del pivote de contención.

04 La afición no se fía de los dirigentes del Cádiz.

La afición va más allá y no se fía de lo que pueda ocurrir en el partido de vuelta. Se sospecha de la mano de Quique Pina (su padre es el presidente de honor del Cádiz y propio el presidente del Granada tiene intereses en el club cadista) y de las relaciones de Manuel Vizcaíno, presidente cadista, con los órganos que rigen el fútbol.

El máximo dirigente del conjunto andaluz es en la actualidad consultor de la Liga de Fútbol Profesional, un cargo del que hace gala en su perfil de la red social "Linkedin". Desde el club azul no se quiere señalar directamente a los dirigentes cadistas, se confía en la limpieza de la competición, pero admiten que hay relaciones que levantan algunas sospechas.

05 Un partido sin televisión implica mayor riesgo.

Hay una última fuente de preocupación en el Oviedo y que señala directamente a lo que pueda suceder el domingo en el partido de vuelta. Es la principal preocupación en la directiva azul. El Cádiz pide una cantidad importante porque televisen el partido de vuelta y hay bastantes posibilidades de que finalmente no sea retransmitido. La entidad carbayona prefiere que las cámaras estén presentes en el Carranza, porque les da más seguridad de cara a lo que pueda suceder.

La situación recuerda a la del último ascenso del Oviedo a Primera División, en 1988, pero a la inversa. En aquella ocasión Vicente Miera, entonces entrenador del Oviedo, logró a través de sus contactos que el partido de vuelta en Mallorca fuera televisado. Era la primera vez en la historia de la televisión que se retransmitía en directo una promoción. El Oviedo había ganado 2-1 en un tenso partido de ida y se pretendía dar publicidad al choque de vuelta para evitar sorpresas inesperadas.

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