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JON ERICE. | Centrocampista del Oviedo

Erice: "Este ascenso es algo que va mucho más allá del fútbol"

"El domingo vamos a ir a ganar, pero pase lo que pase no - va a empañar la grandísima temporada que hemos hecho"

Erice, abrazado al segundo entrenador, Carlos María Rodríguez, celebra el ascenso en Cádiz. MIKI LÓPEZ

Jon Erice pasó ayer por El Requexón para estar con sus compañeros. Ni pudo entrenar ni mucho menos podrá jugar el domingo (12 horas) la ida del partido ante el Nastic por el título de campeón de Segunda B. Bastante complicado fue ya salir al campo en el Ramón de Carranza después de sufrir un accidente de coche que le hubiera dejado fuera de haberse tratado de cualquier otro partido. Pero nada iba a separar al navarro del encuentro en el que se iba a quitar un enorme peso de encima.

Y es que para el mediocentro conseguir el ascenso a Segunda era una cuestión de conciencia. "La verdad es que estoy con un bajón de todo, de tensión, una tensión liberada, una sensación de tranquilidad y de bienestar conmigo mismo increíble. Me he quitado muchas cosas, sentimientos acumulados especialmente el año pasado; incluso, aunque no sea bueno o no sea del todo justo conmigo mismo, he limpiado mi conciencia y me siento increíblemente bien".

A Erice el fracaso del equipo la temporada pasada le dejó huella y que el Oviedo decidiera seguir contando con él le cargó de responsabilidad: "No es fácil que apuesten por una persona que no ha conseguido ni los objetivos individuales ni los colectivos, ni ha estado a su nivel ni ha producido para el club lo que debía, lo que se había propuesto y para lo que se le había traído. Te queda una sensación de rabia, de tensión, de cargo de conciencia más allá de que lo hayas intentado todo y te hayas entregado el cien por ciento".

En la parodia que hizo Cervero de sus compañeros en la celebración del ascenso que tuvo lugar el lunes en la plaza de América aseguraba que a Erice era imposible hacerle callar. Lo decía porque el mediocentro es uno de esos jugadores con peso en el vestuario, de los que llevan la voz cantante y de los que saben expresarse. Ayer le faltaban palabras para describir lo que ha sentido estos días. "Es algo que va mucho más allá del fútbol", se limitaba a decir. Una de las cosas que más ha sorprendido al futbolista es la generosidad de la gente: "Que te agradezcan cosas por un tema como el fútbol en un momento difícil a nivel de muchas otras cosas de la sociedad; que la gente sea feliz el domingo, el lunes, toda la semana, que te den las gracias; ver un sentimiento real de estar agradecidos por algo que has conseguido deportivamente, es una sensación que no sabes cómo expresar, va más allá del fútbol".

En cuanto a su participación en el partido después de tener un accidente que apenas le permitía moverse es algo a lo que prefiere restar importancia. "Si lo ves con tranquilidad son noventa minutos de jugarse algo más importante que un partido de fútbol. No es una heroicidad. Al final hay médicos, fisios, formas de mitigar el dolor o de camuflarlo. Sí, he hecho un esfuerzo, pero creo que no merezco más agradecimiento que cualquier otro compañero porque el compromiso de la gente este año ha sido increíble".

A la hora de colocar esta alegría entre todas las que ha tenido como futbolista, Erice pone muy arriba lo conseguido con el Oviedo porque se trata de un éxito colectivo, no de algo personal como fue para él debutar en la Copa de la Uefa con el Osasuna cuando tenía 19 años. "Es un logro colectivo que va mucho más allá de un equipo de fútbol, de once personas, de veinte, de treinta o de cincuenta. Algo individual nunca se va a poder comparar con un logro colectivo de este calibre".

En cuanto al partido del domingo reconoce que sus compañeros "tratarán de ganar", pero "pase lo que pase no va a empeñar la grandísima temporada que hemos hecho". Y es que "pasarán muchos años para darnos cuenta del alcance y del calibre de lo que hemos conseguido", concluía.

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