El fútbol no es tan impredecible como pueda parecer. En Primera División, donde las diferencias entre los equipos son muy grandes, se establece una relación de enorme coincidencia entre el gasto realizado en la plantilla y el puesto final en la clasificación. Es un tema muy estudiado en economía con una gran correlación en el largo plazo aunque a corto siempre puede haber sorpresas. El Real Oviedo depende de la Liga de Fútbol Profesional a la hora de confeccionar su presupuesto: recibirá de la Liga el límite salarial, el gasto máximo permitido para confeccionar la plantilla. Según las reglas utilizadas por la Liga para calcular el límite salarial puede concluirse que el Oviedo estará entre los 8 equipos que más podrán gastar su plantilla deportiva. Probablemente no sea el equipo que más gaste pero tampoco será el último de este grupo.
La duda que se plantea ahora es clara. ¿Qué aspiraciones debe tener el Oviedo en su vuelta a la Segunda? ¿Un año de transición? ¿Permanencia? ¿Aspiraciones de ascenso? La Segunda División está mucho más igualada que Primera. No hay los importantes saltos que se producen casi entre cada equipo de la categoría superior y por tanto la correlación anterior no es tan clara, pero sí se pueden agrupar los conjuntos en escalones.
Esta temporada, en Segunda División, había cuatro escalones. Un primer rango, compuesto por Betis y Barcelona B con unas cifras inalcanzables para el resto. Un segundo, en el que estaba el Sporting junto a Valladolid, Las Palmas, Osasuna, Mallorca y Zaragoza. El tercero estaría formado por los equipos de la zona media y el cuarto y último, por los equipos con menores ingresos y por tanto que menos gastan en su plantilla, entre los que aparece el Girona que ha roto todos los moldes, ya que su equipo sería el penúltimo de la categoría en virtud de su economía.
¿En qué posición irrumpirá el Real Oviedo 2015-16 económicamente en Segunda División? Se puede decir que ha tenido suerte.
El primer escalón desaparece completamente. El Betis ha ascendido y el Barcelona B, increíblemente, ha bajado a Segunda B. Además, al menos uno de los equipos del segundo escalón, el Sporting, también cambia de categoría. Pueden ser dos si Las Palmas asciende a Primera. Hay otro factor: Valladolid, Osasuna, Zaragoza y Mallorca contaban esta temporada con la compensación por descenso. 2/3 de la cantidad se cobran el primer año y 1/3 el segundo. Esto quiere decir que en caso de que no asciendan, algunos de ellos ya no contarán con esta importante ayuda o la verán reducida a la mitad con una repercusión directa y muy importante sobre el gasto que podrán hacer en su plantilla.
Por último, los tres equipos que han descendido de Primera (Córdoba, Almería y Elche) estaban entre los cuatro más débiles económicamente de la categoría y por lo tanto no habrá ningún "gigante" entre los descendidos. El Elche, descendido administrativamente, no tendrá compensación económica por haber bajado por sus deudas. El Córdoba había subido el año anterior por lo que el derecho a compensación por descenso es menor que la de otros equipos en anteriores temporadas.
Al análisis podemos sumarle que uno de los mayores problemas que tienen estos clubes, que en virtud de su economía deberían luchar por el ascenso, son las grandes estructuras con las que cuentan, más propias de Primera que de Segunda. El Oviedo no tiene ese enorme tamaño por venir Segunda B y puede optimizar su organización a su gusto y dedicar más dinero a su parcela deportiva.
El fútbol no es economía y como prueba más evidente están los casos de Girona y Barça B de esta temporada. Pero el Oviedo tiene garantías suficientes para pensar que estará entre los conjuntos con un presupuesto más ambicioso.
Un último apunte, el cálculo sobre el Oviedo está realizado en base a los ingresos normales - ordinarios sin contar con ninguna aportación extraordinaria del Grupo Carso. La Liga de Fútbol Profesional regula también estas aportaciones extraordinarias y sus limitaciones.
