Los servicios jurídicos del Avilés están estudiando la situación generada tras el fallido fichaje del centrocampista Álvaro Muñiz, que firmó un precontrato con el conjunto avilesino al desvincularse del Pontevedra y que acabó firmando con el Lealtad (Segunda B).

El entrenador blanquiazul, Pablo Lago dice que la decisión del gijonés de romper el precontrato fue "algo inesperado que pasa algunas veces en el fútbol", y lamenta lo sucedido. "Nosotros teníamos un jugador más y ahora veremos como se resuelve esta situación, pero nuestra hoja de ruta sigue siendo la misma y trataremos de incorporar gente que sume". Y añadió: "En eso estamos porque nos faltan dos o tres jugadores que trataremos de incorporar con paciencia para intentar no fallar y mejorar el equipo".

La vuelta atrás de Muñiz y la forma de actuar del Lealtad, que conocía el precontrato, molestaron en el Avilés sobre todo porque se perdió una semana para buscar refuerzos.