"Estoy muy contento porque competimos bien y me gustó mucho la actitud del equipo". Tomás Hervás parece incluso sorprendido y no tiene reparos en reconocer que "no tenía claro el rendimiento que podía ofrecer el equipo cuando esta semana nos han llegado tres futbolistas". El técnico del filial desvela que, en la charla previa al choque, lo único que pudo pedirles a los futbolistas fue "compromiso".

Tomás se muestra satisfecho con el juego y con el resultado y remarca que "ganamos justamente y hasta pudo ser una victoria más amplia de no ser por la expulsión". El técnico del segundo equipo rojiblanco bromeó con que "mejor empezar ganando que como la temporada pasada", en la que el Sporting B tardó siete jornadas en mover su casillero de puntos. Tomás incide en la solidez mostrada por su equipo y destaca que "en acciones de juego, no nos crearon ni una ocasión de peligro".

También lamenta la actitud del árbitro, que mostró once amarillas en un partido de guante blanco: "Los dos entrenadores estamos muy desencantados, no fue un partido para tantas tarjetas, pero en Segunda B se ceban mucho".

El técnico visitante, Ángel Marcos comparte esta queja y hace al árbitro culpable de su derrota por "un decisión muy parcial", en referencia al penalti señalado.