La playa de Poniente será escenario el próximo 19 de septiembre de la primera edición de la Storm Race, carrera de obstáculos similar a una pista de entrenamientos militares, actividad que cada vez está teniendo más adeptos. Un ejemplo es que en la prueba gijonesa se han superado ya los 450 inscritos y probablemente se supere el medio millar ya que el plazo no finaliza hasta el martes de la semana que viene.

El circuito tiene una distancia de 6 kilómetros y 24 obstáculos de todo tipo: paredes verticales e inclinadas, atravesar una zona de neumáticos, reptar, subir cuerdas, porteo de troncos o vadear fosos, son alguno de los que tendrán que superar los participantes. No hacerlo supone la inmediata descalificación si bien la organización ofrece la posibilidad de sustituir los que no se puedan superar por una serie de 20 planchas con salto. La carrera está prevista para las 15 horas del sábado 19 y los participantes saldrán en tandas de cien en las que cada participante será incluido por sorteo. El tiempo máximo para completar el recorrido es de una hora y media. Habrá tres modalidades, individual (masculina y femenina), parejas (masculinas, femeninas y mixtas) y equipos de cinco miembros en los que en cada uno obligatoriamente tiene que haber al menos una persona del otro sexo.