La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Kiev volvió a reservarle una sorpresa a Mata

El asturiano lució el brazalete de capitán en su partido número 37

Pyatov rechaza el lanzamiento de penalti de Cesc. GLEB GARANICH / REUTERS

Juan Mata llegó a la Eurocopa de Polonia y Ucrania con la sensación de formar parte del núcleo duro de la selección española. El asturiano llevaba tres años entrando en los planes de Vicente del Bosque y acumulaba 18 partidos con La Roja, entre ellos uno del Mundial de Sudáfrica. Había confirmado sus expectativas con una primera temporada espectacular con el Chelsea, coronada con la Liga de Campeones ganada al Bayern en su estadio. Pero llegado el momento de dar el salto en la selección, Mata se quedó atrás.

Pasaron los tres partidos de la primera fase -frente a Italia, Irlanda y Croacia- y Del Bosque no le dio a Mata ni un minuto. Tampoco en los cuartos de final contra Francia, ni en la semifinal, con prórroga incluída, ante la Portugal de Cristiano Ronaldo. Silva era indiscutible para el seleccionador, que contaba con Pedro y Jesús Navas como revulsivo. Mata, que había participado en un partido, contra Honduras, camino del título mundial de 2010, corría serio peligro de marcharse de vacío de Polonia y Ucrania.

Pero el arrollador partido de España frente a Italia en la final de Kiev iba a darle a Mata la oportunidad que llevaba esperando durante un mes. Tras el 3-0, logrado por Fernando Torres en el minuto 84, Del Bosque eligió a Mata entre los cuatro jugadores, al margen de los dos porteros, que todavía no habían tenido la oportunidad de participar. Juanfran, Albiol y Fernando Torres se quedaron con las ganas.

A los dos minutos de pisar el césped, Mata acompañó una jugada de Fernando Torres por la izquierda. El delantero madrileño entró en el área con todas las opciones de apuntarse un doblete, pero prefirió ceder el balón a Mata que, con Buffon fuera de la portería, marcó a placer con la zurda. Simplemente con eso, la perspectiva de aquel campeonato cambió por completo para el asturiano. "Kiev me trae recuerdos fantásticos", dijo en vísperas del partido de ayer.

La decepción inicial por la suplencia escondía una sorpresa para Mata, como hace más de tres años. Del Bosque decidió que el de Mata fuese el primer cambio con una gran carga simbólica, ya que Cesc le cedió el brazalete del capitán, ya que en ese momento era el jugador con más partidos en la selección (37). Tomaba el relevo de David Villa, capitán en su partido número 85 con España, en un amistoso en Panamá. Mata es el tercer asturiano que luce el brazalete con La Roja, tras Campanal y Villa.

"Es algo anecdótico, pero es un día que siempre recordaré con mucho orgullo", declaró Mata al final del partido en Televisión Española sobre su capitanía, que volvió a situar a Kiev como una ciudad inolvidable en su carrera.

Compartir el artículo

stats