El Marino de Luanco no se puede permitir otro tropezón en casa. Después del paso atrás que dio el pasado fin de semana, al perder ante el Covadonga en Miramar, el equipo necesita los tres puntos en el segundo partido consecutivo en casa, ante el Astur, para tratar de subir posiciones en la tabla y acercarse a la lucha en la parte alta, el objetivo que se marcó a principio de temporada.

Finalmente el entrenador del Marino, Blas García, tendrá disponibles a 16 jugadores ya que Espolita, que jugó tocado contra el Covadonga y empeoró, y Samuel, que ya se perdió el último partido, no se han recuperado para el choque de hoy. La defensa del equipo azulón queda de nuevo muy tocada por estas bajas y prueba de ello, es que todos los jugadores de atrás disponibles estarán sobre el césped de inicio, salvo el portero suplente Davo.

Por contra, el técnico cuenta con Dani López, que se ha recuperado totalmente de la lesión que sufrió hace dos semanas en Posada frente al Urraca, además de con Pablo Hernández, que sufrió unas molestias tras la final de la Copa Regiones UEFA ante el Tuilla, pero ayer se entrenó con normalidad y todo apunta a que será titular en Miramar.

Así, el entrenador puede optar por colocar a Dani Laviana, en la portería; Pablo Suárez, José Ángel, Gabancho y Guaya, en defensa; Pablo Hernández y Geni, en el centro del campo con Riki en la derecha y Dani López en la izquierda; Omar Álvarez, en la media punta, y Omar Sampedro, arriba. En el banquillo esperarán su oportunidad Davo, Imanol, César, Juanín y Álvaro Viña.

El equipo luanquín tiene que tratar de mejorar sus números en casa. Por el momento, el Marino solo ha conseguido una victoria en su feudo, ante el Praviano, otros dos partidos los empató, ante el Langreo y el Condal, y ahora llega de perder ante el Covadonga.

Tras el partido de hoy, el Marino comenzará a preparar su siguiente choque, ante el Gijón Industrial, con un día menos para afinar sus armas, ya que el partido se disputará el próximo sábado, a las 16.45 horas, en Santa Cruz.