Hace unos meses, el Siero Deportivo de balonmano femenino conseguía una gesta histórica de la que finalmente no podrá disfrutar. El conjunto femenino senior de Pola de Siero jugaba, por invitación, la fase de ascenso para ascender a División de Honor Plata. Y contra todo pronóstico, consiguió ascender. Sin embargo, el alto coste económico y la falta de efectivos les hizo renunciar a la categoría. Por lo que se inscribieron en Primera Estatal, la tercera categoría del balonmano femenino, con carácter interterritorial, en la que se medirán a cuatro equipos de Cantabria y tres de Castilla y León, y serán las únicas asturianas.

Su debut será el próximo domingo 8 de noviembre a las 12 horas en Pola de Siero ante el Castro Urdiales. Su grupo lo completan, en Castilla y León, el Aula, Aceitunas Olibher y Balonmano Delicias, todos ellos de Valladolid; y el Ciudad de Salamanca. Y de Cantabria tendrán como rivales al Pereda, Reocín y Go Fit Sinfín.

La plantilla la componen, a las órdenes de Sergio García, diecisiete jugadoras: María Alonso, Marta Granda, Ana Rodríguez, Paula Solís, Carmen González, Paula Fernández, Sandra Villa, Sara Díaz, Cristina Rojo, Natalia Suárez, Natalia García, Alba Alonso, Odile Alonso, Julia Baizán, Sheila Álvarez, Elena Granda, Carmen González.

"Muchas jugadoras no tienen experiencia suficiente. La media de edad es de 20 años y lo que queremos es disfrutar de la categoría, sin marcarnos objetivos de mano", explica Sergio García, entrenador del equipo. "Trabajamos para que vayan cogiendo experiencia y que se vayan reenganchado algunas de las jugadoras que llevan meses de jugar. Es importante que no se agobien por los resultados. Esperamos que el equipo en la segunda vuelta alcance el máximo nivel", subraya.

El Siero Deportivo tuvo que hacer un esfuerzo importante para salir a competir en Primera Estatal. Los gastos no son tan grandes como en División de Honor, pero aún así el presupuesto se dispara con respecto a la competición regional. "Esperamos que la gente de Siero nos apoye y vaya a vernos. El club ha tenido que hacer un esfuerzo económico, con apoyos de empresas del concejo, y estamos obligados a responder con trabajo y resultados", relata García. Además, una de las iniciativas que han puesto en marcha ha tenido buena acogida. El club cuenta ya con más de 400 simpatizantes, a un precio de diez euros el carné, que sirve para cubrir los gastos de viajes, fichas y arbitrajes.

Otro de los retos del curso será hacer frente a rivales con mayor experiencia e implantación en la categoría. "Hay que hacer un trabajo psicológico, que vivan cada entrenamiento como un partido", señala Sergio García. De momento, las sensaciones en el vestuario, a poco más de una semana para comenzar la competición, son muy positivas. "Nuestro fuerte es la piña del vestuario y el conjunto. Las nuevas jugadores se han acoplado muy rápidamente", afirma Sandra Villa, capitana del equipo, que reconoce que el objetivo de todas es disfrutar del balonmano: "La ilusión que le ponemos por estar haciendo lo que nos gusta sin cobrar por ello es fundamental".

El Castro Urdiales será la primera prueba de fuego de una temporada muy ilusionante en la que sueñan repetir la gesta del curso pasad. "Intentaremos hacer méritos para lograr ir a la fase de ascenso, y si lo logramos, iremos a ganar para sacar la espinita de jugar en Plata, al no haber podido este año por motivos económicos", concluye Villa.