"Antes del encuentro estaba un poco nervioso, pero a la hora de saltar a la cancha todo se olvida". Son las palabras de Ángel Abril, que el pasado sábado volvía a disputar un encuentro oficial tras una temporada parado por una lesión en su rodilla derecha.

El base mierense cumplió con las expectativas anotando 10 puntos y repartiendo 4 asistencias. "Es un buen balance, pero lo importante es la victoria del equipo", asume el jugador. El Pozo Sotón se impuso al Grupo Covadonga por 89-67, lo que para Abril supone "una victoria importante, ya que era el primer partido de la temporada y uno de los objetivos es hacernos fuertes en casa", explica.

Con el primer triunfo de la campaña, los mierenses se colocan segundos en la clasificación, únicamente superados por el Agustinos Eras de León, que logró una diferencia mayor. "Es algo que no nos debe importar a estas alturas", recalca Ángel Abril.

El mierense se tendrá que enfrentar esta campaña a la dura competencia de Luan Pereira. "Es algo bueno, ya que nos hace mejorar", explica, a la vez que define al base brasileño como "un jugador con mucha calidad, la cual se nota ya desde los entrenamientos".

El jugador mierense se muestra encantado con el papel de los fichajes en el debut liguero. "Cruvinel y Tyrone son dos portentos físicos e Isenbarger un gran tirador", destaca. A su vez, el base se deshizo en elogios hacia Alioune, quien "aportó tanto en ataque como en defensa".

El Pozo Sotón se mide el sábado al Instituto Rosalía de Castro de Santiago de Compostela. Los gallegos cayeron derrotados en el primer encuentro liguero, pero Abril asume que "en EBA no hay rivales fáciles".