"Fue una pena porque se nos escapó al menos un punto al final, aunque lógicamente el partido está muy condicionado por el penalti que fallamos en la segunda parte". Así resumió el técnico del Avilés, Pablo Lago, la derrota (1-0) en el derbi comarcal contra el Marino en Miramar. "Al final no supimos defender un centro lateral porque hubo un desajuste en las marcas y se nos fue un empate que creo habría sido lo más justo", añadió.
El técnico destaca que el campo, muy blando y pesado, obligó a que el ritmo del partido fuera lento y que no hubo muchas ocasiones por el respeto que se tenían ambos equipos. "Por eso fue decisivo el fallo en el penalti porque, de haber entrado, se nos habría puesto muy de cara pero al fallarlo el equipo lo acusó y ellos aprovecharon para apretar más".
Una derrota que escuece pero de la que el equipo tiene que sacar lecturas importantes, según Lago. "Quizás en los minutos finales tengamos que protegernos mucho más de lo que lo estamos haciendo. En Luanco acabamos con dos delanteros por tratar de ganar, pero tenemos que darnos cuenta de que el partido que no podemos ganar en 85 minutos, es importante no perderlo al final". Y añadió: "Es la lectura que sacamos de un partido muy igualado ante un rival directo en el que no puntuamos pensando en irnos arriba para poder ganar, pero jugando a domicilio y con el partido empatado hay que trabajar mucho más a nivel defensivo".
La derrota cierra un complicado mes de noviembre en el que el equipo perdió dos de los tres partidos que disputó lejos del Suárez Puerta. "Nos queda el mal sabor de boca tras perder con Langreo y Marino porque no los hemos gestionado bien, y la segunda vez ya no es casualidad. Hay que aprender mucho más a gestionar los partidos fuera de casa contra los rivales de arriba", explicó.
El equipo sigue segundo, pero el Caudal se va con cuatro puntos de ventaja y el Langreo se acerca a cinco aunque el técnico avilesino asegura que no mira a los rivales. "Ahora estamos en una posición privilegiada que ni mucho menos esperábamos y no nos preocupan ni los de arriba ni los de abajo. Nos preocupa el gestionar mejor estas situaciones, ser muy intensos, recuperar lesionados y seguir mejorando el equipo porque es un camino muy largo el que nos espera, con muchos partidos que jugar y mucho trabajo por hacer", explicó.
El derbi comarcal ya pasó y la preocupación de Pablo Lago es que se recuperen los jugadores, "porque trabajaron mucho", y preparar el partido del próximo martes día 8 de diciembre (15.45 horas) en el Suárez Puerta ante el Astur. "Tenemos que intentar ponerse en 39 puntos y seguir sumando porque creo que el equipo está muy bien y hay que volver a la normalidad de afrontar un partido de casa para ganar y seguir creciendo", señaló.
Semana atípica. Esta es una semana atípica porque el próximo domingo no hay Liga al jugar la selección de Xiel la eliminatoria de la Copa de las Regiones UEFA, y la jornada liguera se disputará el martes y miércoles próximos. El equipo blanquiazul descansó ayer y entrenará hoy, miércoles, jueves y viernes en Miranda (10.30 horas), descansará sábado y domingo y volverá al trabajo el lunes anterior al partido contra el Astur.
