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Fondo Norte

De la gala a la actividad frenética

El Sporting vuelve a encontrarse con un Betis que estuvo mejor de lo que está en estas jornadas

Liquidada con elegancia la primera gala de la Liga de Fútbol Profesional, el balón vuelve al verde. La gala fue, en efecto, gala porque cada uno vistió sin extravagancias y cada una lució sus mejores trapos, que es de lo que se trataba. Al Sporting le faltó el premio al gran timonel, cuyo mérito la pasada temporada, y ésta, fue enorme, pero a un caballero que, entre otros títulos, guarda una medalla de oro olímpica no tuvo que hacerle daño que el premio se fuera a Pablo Machín, el entrenador del Girona, que se merecía un consuelo tras la tremenda decepción del pasado mes de junio. Los galardones a Cuéllar y Bernardo, incuestionables. El primero fue premio "Ricardo Zamora", que le llega al portero menos goleado, y ante las cifras no queda nada por discutir. El defensa, sin duda, fue el mejor de la Liga y su papel en el ascenso lo recordará por siempre el buen pueblo fiel rojiblanco. Una buena iniciativa esa gala, con la anécdota incluida de Messi y su hijo: "Papá, ¿te vas de nuevo al gol?", le dijo. Una bella frase: irse al gol, que es el mejor sitio posible para un futbolista. Hay otros que nunca van al gol.

Terminada la gala celebrada en Barcelona, los equipos recuperan la competición. Anoche, el Atlético de Madrid en Reus y el Granada del parrillero dos estrellas y a un punto, en Leganés. Ojo, a un punto, para los que hablan más de la cuenta. Le digo a usted, señor de guardia. El Sporting se va a Sevilla por aire para no perder tiempo en un largo desplazamiento; más de ochocientos diez kilómetros por la Ruta de la Plata, vía salvadora para llegar al Sur, pero larga para un equipo que ha de llegar descansado a sus compromisos. El del domingo, más importante que el de hoy, aunque éste, con todos los respetos, no es desdeñable.

Puede que la sintonía con el canal historia esté repetida, pero en días como éste hay que recordar aquel lamento de Rafa Iriondo en la sala de prensa del viejo Molinón tras caer los béticos ante los rojiblancos de Vicente Miera: "Me dijeron que Valdés estaba viejo, pero ya, ya", sentenció. El llorado Tati había realizado una de sus exhibiciones de reparto de juego y de pases al hueco. En aquellos tiempos las televisiones no ofrecían tantos partidos como ahora y los informes eran verbales. El informador de Iriondo no anduvo muy listo. Los viejos aficionados rojiblancos recuerdan sin duda partidos excelsos de los rojiblancos frente a los verdiblancos, que tuvieron equipos de lujo.

El Sporting de hoy no tiene ningún jugador parecido a Tati, pero puede complicarle la vida a un Betis que no vive sus mejores días. Estaba mejor cuando ganó en el Anfield del Piles no hace tanto. El gran timonel va a mover peones. Que la suerte le acompañe.

Por lo demás, si alguien tiene un defensa a mano que se lo haga llegar a Rafa Benítez, que se queda sin Carvajal para un mes. Sin laterales y sin centrales, el entrenador blanco va a tener que hacer milagros. Pero ése es problema blanco. Las buenas costumbres se han de mantener, incluso en época de anticiclón; por eso, si pregunto, ¿molesto?: ¿qué fue de la venta de las acciones del paquete mayoritario del Sporting? La venta, como el general, ni está ni se la espera. Hoy los tiempos adelantan que es una barbaridad.

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