El sorteo de los octavos de final de la Copa del Rey deparó tres derbis -Barcelona ante al Espanyol, Betis frente al Sevilla y Rayo Vallecano ante el Atlético de Madrid-, mientras el Mirandés, único superviviente de Segunda, se verá las caras ante el Deportivo.

El sorteo tuvo lugar en la sede de la Federación Española en Las Rozas (Madrid) y el Cádiz, al que la Federación da ganador de su eliminatoria frente al Real Madrid por alineación indebida por parte del conjunto blanco del ruso Denis Cheryshev según las resuluciones del juez único de Competición y del Comité de Apelación de la propia Federación, quedó emparejado con el Celta.

El "caso Cheryshev", no obstante, está aún pendiente de resolución por parte del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), que se reunió en la mañana de ayer antes de que se celebrara el sorteo de los octavos de final por si podía emitir un veredicto respecto al recurso presentado por el Real Madrid contra la resolución del Comité de Apelación de la Federación.

Pero el TAD no pudo tratar el tema al no haber recibido aún las alegaciones que pudiera realizar el Cádiz. El conjunto gaditano tiene de plazo hasta el día 23 para hacerlo y su consejero delegado, Francisco Canal, adelantó que esperarán hasta el último día para hacerlo "no como estrategia ni para incomodar al Real Madrid, sino para presentar el mejor recurso posible".

El TAD suele reunirse los viernes, pero como el día 25 es fiesta (Navidad) no lo hará hasta el próximo día 28, lunes. Será entonces cuando, ya con las anteriores resoluciones del juez de Competición y del Comité de Apelación sobre la mesa, así como con el recurso del Real Madrid y las alegaciones del Cádiz, tome una decisión definitiva sobre el "caso Cheryshev" que agotará la vía deportiva.

Pero el Madrid, en caso de que la resolución del TAD también vaya en su contra, está disputesto a llegar hasta el final en defensa de su postura, basada en que ni el jugador ni el club blanco recibieron la comunicación de la Federación de que Cheryshev (sancionado con un partido la pasada campaña cuando militaba en el Villarreal) recibieron la comunicación de la sanción. Y llegar hasta el final, como ratificaba ayer el presidente blanco, Florentino Pérez, es acudir a la justicia ordinaria: al Juzgado Contencioso-Administrativo.

Pérez admitió que en el club "no hemos estado a la altura de las circunstancias porque el jugador debería saberlo (que estaba sancionado) y alguien del club también", pero reiteró que "nadie sabía nada porque no se lo habían dicho y la norma dice que la sanción solo surte efecto cuando se le comunica personalmente al jugador". "Queremos que nos juzguen en derecho, no en constumbres", concluyó.