El Lealtad se levantaba ayer después de dos derrotas para iniciar la segunda vuelta con una clara y competida victoria ante el Peña Sport, recuperando así su fortaleza en Les Caleyes.

El primer hándicap que se encontraron ambos equipos fue el estado del terreno de juego. La alfombra de Les Caleyes dejó paso a un césped bastante embarrado y pesado debido a la lluvia de los últimos días, lo que propició que hubiese muchas imprecisiones por parte de los dos conjuntos y el juego careciese de fluidez.

Tardó 20 minutos en llegar la primera ocasión de peligro. Pablo Espina recuperaba un balón y lo enviaba al flanco izquierdo para Álex, éste servía el esférico al corazón del área donde era despejado por la zaga navarra pero Mendi, conocedor de las segundas jugadas, recogió el rechace para poner en apuros al guardameta del conjunto navarro. Poco más tarde, a la salida de un córner, Álvaro Cuello estuvo cerca de inaugurar el marcador tras cabecear un balón que no encontró portería por muy poco.

Con el paso de los minutos el cuadro asturiano se sentía más cómodo. Así, mientras que las acometidas sobre la meta rival eran cada vez más frecuentes, Javi Porrón era prácticamente un mero espectador. La insistencia de los de Villaviciosa tuvo su premio superada la media hora, poco después de que los visitantes protestaron un posible penalti sobre Manjón.

Jorge servía un saque de esquina desde el córner derecho del ataque maliayo y el meta Tanis, fichaje del Peña Sport en el mercado invernal, se hizo con facilidad con el balón pero al dejarse caer el esférico se le escapaba y quedaba a los pies de Mendi, que solo tuvo que empujar el balón al fondo de la red para inaugurar el marcador.

El Lealtad ofreció tras el gol su mejor imagen, llegando a tener varias ocasiones claras para doblar su ventaja antes del descanso. La más peligrosa la tuvo Álex, que aprovechó un desajuste de la zaga navarra para superar a Tanis, salvando Iván el gol en la línea de meta. El pobre bagaje ofensivo de los de Tafalla, junto al buen orden defensivo de los locales, impidió cualquier atisbo de empate antes de que los futbolistas enfilasen los vestuarios.

Tras la reanudación, el partido siguió con un Lealtad dominador y cercando el área de Tanis. Las acciones a balón parado se convirtieron en el arma más peligrosa para el equipo de Villaviciosa, aunque no acertaba a sentenciar el partido. Ello, junto a la imperiosa necesidad de sumar hizo que el Peña Sport avanzase líneas, aunque su falta de capacidad para generar situaciones de peligro hizo que los maliayeses no viesen peligrar los tres puntos en ningún momento. Y es que los de David Ruiz solo se movían por impulsos, sin ningún tipo de orden ni concierto, lo que se transformaba en una carencia de ocasiones de gol.

La sentencia a favor del Lealtad llegó por medio de Álvaro Cuello en el minuto 85, al rematar de cabeza al fondo de la red un saque de falta botado por Pablo Espina. Las acciones a balón parado, uno de los puntos fuertes del bloque de Javi Rozada, permitió al último fichaje de los de Villaviciosa estrenar su casillero goleador como negrillo y tranquilizar definitivamente a la parroquia local.

La puntilla para culminar la goleada llegaría a falta de un minuto para que se cumpliese el tiempo reglamentario. Robert recogía un balón recuperado por Llano para iniciar una potente cabalgada por la banda derecha, tardó poco en entrar al área, donde salvó con sutileza la entrada de un defensor y batió al guardameta visitante con una fantástica vaselina para firmar un auténtico golazo.