La semana comenzó con la entrega del "Balón de Oro" en un ceremonial FIFA de ésos que no conmueven ni a los más sensibles. El mismo día, el amanecer de ese día, había despertado el mundo rock con una triste noticia. Muy triste, como lo son las noticias que tienen que despedir a la gente de este mundo. David Bowie, el hombre del glam rock, del rock cuidado, del pop extrafino, del hard, o casi, con "Tin Machine", de tantas cosas... decía adiós.
Era como si ese día futbolero fuera un día de discos de oro en lugar de "Balones de Oro". Bowie se despedía dejando una densa y siempre revolucionaria obra. Sí, fue día de "Balón de Oro" entre la tristeza de la muerte de una voz de discos de oro.
Entre tanto, el Madrid seguía con sus cuitas. La FIFA decía que los hijos de Zidane eran inmigrantes explotados. Al parecer había irregularidades en el fichaje de menores, y los hijos de Zidane eran irregulares, según FIFA, organismo sumo de fútbol que sabe y domina como nadie las irregularidades. Si alguien anda en charcos embarrados es esta especie de cúpula "Santa" del mundo del balón.
Al poco supo el Madrid que el segundo de Zizou no tenía carné de entrenador y, por tanto, no podía ser segundo suyo. Había que apuntarlo como utillero, o así. Se sumaba todo ello a "lo" de De Gea, la Copa, Carlo, Benítez y las "palmatorias" constantes en partidos que podían haber puesto al equipo en la atmósfera alta de la tabla, donde se respira aire puro.
De nada sirven ciertos desahogos que hacen en algunos partidos. Desahogos innecesarios que sólo empeoran su imagen. Esperemos, pues, que vuelva el fútbol, que también gane a los de su presupuesto y, sobre todo, que vuelvan los buenos modales.
Mientras cambia la cara no queda otra que ir tragando y esperar a la Roma. Lo mismo para ese momento cogen gas, se ponen finos, empiezan a soltar músculo, a tener asegurados los carriles y, por tanto, los pasillos de seguridad... todas esas cosas que dicen los sabios. Este equipo blanco que a veces nos pone pálidos suele hacer tonterías como, de pronto, ganar una Liga de Campeones. Lo mismo suena la flauta si cumple los pasos señalados. Pueden empezar por aprender a cantar a Bowie con "Starman" y ver si vuelven a la galaxia.
