El Marino sigue su escalada y ya es sétimo con 36 puntos, a cuatro de la promoción, algo impensable hace sólo un mes, pero el técnico, Blas García, no se sale del guión prudente. "Cuanto más cerca estemos de los puestos de privilegio mejor, sobre todo desde el punto de vista psicológico y para generar ilusión en todos, pero nosotros seguimos teniendo un objetivo a corto plazo que es afrontar el partido siguiente para ganar porque necesitamos sumar mucho para superar los 70 puntos que nos metan arriba", recordó.

El equipo azulón lleva pleno de tres victorias desde que comenzó la segunda vuelta (Colunga, Praviano y Tineo) y lo más importante para el técnico es que cada día es más sólido. "Empieza a ganar mostrándose como el equipo grande que es y ya da la sensación de dominio y de saber jugar los partidos", precisó.

El triunfo contra el Tineo (2-0) ya queda atrás y el objetivo ahora es puntuar en Ganzábal y al menos devolver la moneda a los langreanos, que se llevaron un punto de Miramar (2-2). El técnico, Blas García, asume que el partido es una reválida para medir la mejora de los suyos. "El Langreo es un equipo de nuestro nivel y hay que asumir el partido como un test para ver como nos comportamos y como vamos a llevar los próximos meses, no tanto en puntos, porque al margen del resultado tendremos que seguir peleando muchísimo, como en sensaciones por ver si podemos con los partidos grandes".

El Langreo está lanzado en su mejor racha de la temporada, pero "no me mete más miedo que el que podamos dar nosotros", asegura Blas García. "Están demostrando que tienen una gran plantilla y sus números lo dicen todo, pero nosotros vamos con lo nuestro y no tenemos que tener miedo a nadie", añadió el técnico.

Blas define al Langreo como "un equipo muy intenso que da un gran ritmo al juego, que presiona con fuerza y que cuenta con un gran bloque e individualidades de mucha calidad que afianza aún más la presencia de Michu. Está segundo por méritos propios y es un rival de primer nivel".

El Marino no podrá contar con el central Boris por sanción, una baja importante porque una de las causas que explican la reacción azulona es haber conseguido un bloque que dio una gran solidez defensiva al equipo. "Está claro que los entrenadores no queremos tocar lo que funciona y que Boris es uno de los nuestros grandes futbolistas, pero la plantilla está para eso y tenemos que encontrar el recambio adecuado y a pesar de todo seguro que sacaremos un equipo que pueda competir muy bien", señaló Blas García.

El técnico quiere claro como quiere que sea su equipo en Ganzábal. "Yo quiero ver al Marino de los futbolistas que tengo. Si ellos se ponen en el campo como se saben poner, no quiero más. Quiero ese equipo", concluyó.