Ferrán Bassas no es sólo, con 115 pases de canasta, el máximo asistente de la LEB Oro. También es el tercer jugador de la Liga que más minutos (578) ha disputado. Y es que la lesión de Javi Marín ha obligado al base catalán del Unión Financiera a realizar un esfuerzo extra. "Hay momentos que sí me noto más cansado, pero al final creo que estoy aguantando bien los minutos", dice el jugador, de 23 años, que cumple su tercera temporada en el conjunto ovetense.
Bassas es una de las columnas vertebrales en las que se sostiene el Unión Financiera. El jugador posiblemente más imprescindible ahora mismo en el equipo. Un papel protagonismo que se ha ganado partido a partido desde su llegada a Oviedo. Y ahora le toca asumir galones y marcar los objetivos en el equipo. El catalán es ambicioso y reconoce que no se pueden conformar con una permanencia que ya está prácticamente garantizada. "No hay que conformarse con la salvación, hay que pensar en más. Nuestro objetivo tiene que ser estar en el play-off y una vez que lo consigamos ya se verá hasta dónde podemos llegar. El objetivo del club es la permanencia pero los jugadores tenemos que ser más ambiciosos", añadía.
El equipo está en condiciones de responder a la ambición de Bassas. Ahora mismo, con once victorias, son sextos, empatados con el tercer clasificado. Una situación que el base catalán considera que ha de valorarse. "Me da la sensación de que el entorno no está del todo satisfecho y estamos haciendo una temporada muy buena, aunque es verdad que nosotros tenemos que ser exigentes con nosotros mismos y no conformarnos", añade.
También reconoce Bassas que esta temporada el Unión Financiera ha conseguido juntar a un equipo muy competitivo y que puede dar grandes alegrías a la afición ovetense: "Hay talento y estamos trabajando bien, poco a poco vamos a más". Un equipo que ha cambiado algo su estilo con respecto a temporadas anteriores: "En años anteriores jugábamos a un ritmo más elevado, hacíamos más tiros, más ataques, y este año, aunque seguimos teniendo un ritmo alto, tenemos más equilibrio, más cabeza", explica el base.
Bassas también reconoce que en los dos últimos partidos en casa no han rendido al nivel esperado. "En casa estábamos jugando bien, pero creo que en esos dos partidos (ante Huesca y Logroño) salimos desconcentrados de inicio y dejamos que nos metieran unos parciales en contra que nos hicieron ir a remolque. Como estábamos en Pumarín pensábamos que remontaríamos, pero no fue así", explicaba. El equipo vuelve hoy a los entrenamientos para empezar a preparar el compromiso del 5 de febrero en Cáceres. Un partido al que podrían llegar con un refuerzo importante en el que está trabajando el club.
