La Farinato Race volverá este domingo a escena en Gijón. El parque de Los Pericones será nuevamente el encargado de albergar una prueba única en la que los deportistas tienen que superar un total de treinta obstáculos que se encuentran en su camino. En esta edición, la participación se ha duplicado, acercándose a los dos mil inscritos que llegarán procedentes de 36 provincias españolas así como desde Portugal.

Un sinfín de trampas están listas para poner a prueba la resistencia física y mental de los deportistas, que tendrán que superar las infraestructuras con las que se encontrarán en un recorrido de cinco kilómetros. En su camino se encontrarán barro, agua, hielo, alambres de espino con corrientes eléctricas y fuego. La organización, incluso, ofrecerá algunos nuevos obstáculos como un tobogán embarrado o pasar por debajo de coches. También se guarda con secreto alguna sorpresa.

La prueba, que fue presentada ayer, contará con diez tandas que se iniciarán a las 9.50 horas con la carrera élite. Un bonito reto que superar y que cada vez cuenta con más adeptos para poner al límite sus cuerpos y disfrutar de una carrera única e incomparable.