La alemana Angelique Kerber, sexta cabeza de serie, rompió los pronósticos al conquistar el Abierto de Australia tras superar 6-4, 3-6 y 6-4 a la gran favorita, la estadounidense Serena Williams. Kerber logrea así el primer "grande" de la su carrera. Kerber estuvo a punto de caer en primer ronda, cuando salvó una bola de partido ante la japonesa Misaki Doi.