Sumar quince puntos en los doce partidos que restan para concluir la temporada y llegar a los 75 en la jornada 38. Ese es el mínimo que, según los cálculos de los técnicos del Avilés, tendrá que hacer el equipo en el último cuarto de Liga para meterse en el play-off de ascenso. Doce partidos decisivos para que cada equipo cumpla los objetivos marcados al inicio del año y todos tienen hechos sus cálculos, aunque al final siempre hay sorpresas porque el fútbol es imprevisible.

En el Avilés no se quiere mirar a tan largo plazo y sólo se piensa en ganar cada domingo para mantener la buena línea de resultados que sigue el equipo desde que empezó la temporada (sólo cosechó cuatro derrotas y tres empates en 26 partidos) para luchar por el ascenso, un mero sueño a finales de julio cuando todos sus rivales tenían las plantillas casi al completo y prácticamente habían copado el mercado asturiano, mientras que en la blanquiazul sólo estaba Matías y se completó con descartes de otros equipos y con algunos jugadores que tenían decidido dejar el fútbol. Un dato revelador del excelente papel que están realizando los avilesinos en su año más difícil tras la marcha de Clarkson.

El Avilés es ahora tercero con 60 puntos y la media necesaria en los cinco últimos años para entrar entre los cuatro primeros fue de 72 puntos. El cuarto clasificado más anotador en este tiempo fue el Tuilla de la pasada temporada (77 puntos) y el conjunto langreano fue también el que menos puntos necesitó (65) para meterse en play-off en la temporada 2011-2012, en la que el Caudal de Paco Fernández llegó hasta los 93 puntos.

El referente más cercano para los avilesinos está en esa temporada, la 2011-2012 que, con Ricardo Bango en el banquillo en el primer año de Real Avilés Nueva Gestión (RANG), los blanquiazules sumaron 89 puntos, el récord del club en Tercera. En aquella ocasión, el equipo consiguió 27 puntos en el primer cuarto, 31 en el segundo, (es decir 58 a estas alturas), y 31 en el último, convirtiéndole en el mejor equipo en ese tramo por delante de los 27 del Caudal.

Y la trayectoria en esta Liga está a favor del equipo de Pablo Lago, que después de 26 jornadas tiene dos puntos más (60) que el de Bango tras lograr 33 puntos en los trece primeros partidos, y 27 en el segundo tercio porque aunque perdió el mismo número de partidos (dos) ganó tres menos (ocho) y empató con el Gijón Industrial, Tuilla y Covadonga.

Estos números, en todo caso, no tienen más valor que la mera estadística y lo que realmente preocupa en el seno del equipo es ganar el próximo domingo (16.45 horas) en Santianes al Colunga, un debutante en la categoría que se ha convertido en la revelación del año y que está luchando por el play-off bajo la dirección de José Luis Rodríguez, exdirector general del Avilés con RANG y el hombre que devolvió la ilusión a la afición realavilesina con su llegada en junio de 2011.