Si hay un jugador que puede dar una clase magistral de lo que es disputar un play-off de ascenso a la ACB ese es sin duda Diego Sánchez. El jugador gijonés inicia el viernes su octava participación en una eliminatoria para subir a la máxima categoría. En cuatro de las siete que ya lleva disputadas ha conseguido llegar hasta el final y lograr una plaza en la ACB. Eso sin contar los ascensos que ha conseguido a otras categorías, como en su primera temporada en el Unión Financiera, cuando consiguieron subir de LEB Plata a Oro, en ese caso sin necesidad de play-off.

"Cada uno es diferente, sí que es verdad que es el momento más bonito de la temporada. Por el reto y por ver cómo cada equipos modifica algunas cosas en cada partido. La verdad es que es apasionante", dice este jugador que habla con la ilusión de un debutante del play-off que comienza el viernes: "Tengo ganas de que llegue ya el partido y de ver el ambiente en las gradas de Pumarín".

Diego Sánchez bromea sobre el tiempo que ha pasado desde que comenzó a jugar a este deporte que le sigue apasionando como el primer día. "Eso está en imágenes en blanco y negro", dice sobre los momentos en los que un joven alero disputaba por primera vez un play-off de ascenso a la ACB y lo hacía con el equipo de su ciudad, el Gijón Baloncesto. Uno de sus compañeros entonces era un también joven Carles Marco, ahora su entrenador en el Unión Financiera. La siguiente temporada, la 1998-99, volvió a jugar el play-off con el Gijón Baloncesto. Fue su primer ascenso a la ACB. Curiosamente entonces uno de sus compañeros era Javi Rodríguez, al que también tiene ahora en el cuerpo técnico del equipo ovetense.

Esa fue su última temporada en Gijón y después llegaron muchos lugares en los que Diego Sánchez dejó huella por su profesionalidad. Una trayectoria que aún no ha tocado a su fin. "He tenido suerte de estar en buenos equipos", dice sobre tantos partidos de play-off, que, insiste "son los más bonitos".

De sus primeros play-off, los de Gijón, tiene "recuerdos bonitos", pero reconoce que en estos momentos está "deseando que llegue este play-off". Y es que la ventaja de jugar en el Unión Financiera es que un play-off se disfruta de una manera diferente: "Es especial porque es un equipo en el que no tienes presión, no es lo mismo. El equipo ha funcionado esta temporada. Somos ambiciosos, pero sin esa presión que se tiene en otros equipos. Lo que más me importa es que la gente disfrute al máximo".

Y es que Diego Sánchez sabe lo que es jugar un play-off de ascenso a la ACB en Pumarín. En el equipo sólo lo saben él, Víctor Pérez, Ferrán Bassas, Kevin van Wijk y Agustín Prieto. "La gente en Pumarín todavía nos lo recuerda. Sólo por lo que disfrutaron ellos merece la pena. La remontada ante Palencia fue algo espectacular", rememora el asturiano.

Tanto le emocionó aquello que reconoce que lo más importante para él, por encima de marcarse metas de llegar a una u otra eliminatoria, es que vuelvan a suceder cosas extraordinarias en Pumarín, que de nuevo la magia de ese pequeño pabellón permita que se vivan momentos que, como lo fueron aquél año, se queden grabados en la memoria del espectador: "Me gustaría ganar algún partido de esos bonitos en Pumarín".