Uno de los elementos más exóticos del rival del Langreo en esta promoción de ascenso es la gira que en pretemporada realizó por Estados Unidos. La empresa propietaria del club de Alcalá de Guadaíra, AMC CF, dispuso un viaje tanto para el primer equipo como para el filial hacia Nueva York.

En esa expedición estaba Chiqui Torres, como integrante del cuerpo técnico, pero no como primer entrenador."El dueño del club hizo un esfuerzo para que fuéramos allí a realizar la pretemporada", destaca Torres.

El entrenador admite que "en el plano deportivo no nos ayudó mucho, aunque sí en el plano personal, ya que permitió que una plantilla que era prácicamente nueva se conociera". El precio a pagar fue el cansancio de unos jugadores que en su mayoría no son profesionales y tuvieron que recorrer miles de kilómetros en la pretemporada. "Si equipos de primer orden mundial como el Barcelona o el Real Madrid se quejan por estas giras, para un conjunto de Tercera División como nosotros tampoco fue algo realmente positivo".