El Avilés afronta esta tarde el partido de ida de la primera eliminatoria del play-off de ascenso ante el Lagun Onak en Garmendipe (Azpeitia) con el objetivo de conseguir un resultado que le permita pelear el Suárez Puerta por continuar en competición. El técnico, Pablo Lago, reiteró durante toda la semana que hay que tener "mucha paciencia" porque, recordó, "este es un partido de 180 minutos y es posible que no se resuelva hasta los veinte últimos minutos en el Suárez Puerta".

Los avilesinos tienen el máximo respeto al rival. El conjunto guipuzcoano ha ganado diez partidos en casa en la Liga, ha empatado cinco y ha perdido cuatro, para sumar un total de 35 puntos después de meter 23 goles y encajar 16 en su campo. Fueron muy regulares durante toda la temporada, pero se atascaron un poco al final y en los cuatro últimos partidos sólo lograron un triunfo (2-1) ante el Aurrerá de Victoria, el resto fueron empates a un gol.

Los blanquiazules, por su parte, presentan unos excelentes números como visitantes al ganar 12 partidos, empatar 2 y perder 5 para lograr 38 puntos. Un dato curioso es que el Avilés metió 39 goles fuera (uno más que en casa), y encajó 12. Las últimas victorias fueron ante el Roces (1-7) y el Astur (0-4), unas goleadas que Pablo Lago no quiere sobredimensionar porque, señaló, "fueron ante dos equipos descendidos que lógicamente no tenían la tensión competitiva idónea".

Lago estudió minuciosamente los informes del rival y llegó a la conclusión de que es el típico equipo vasco que juega con mucha intensidad y al que es difícil sorprender en su campo. El técnico sabe como quiere jugar pero le falta decidir el once inicial aunque tiene claro que en un partido a 180 minutos "todos van a tener su ocasión". De momento, tras el entrenamiento de la mañana de ayer en Mareo, en el que hubo vídeo del Lagun Onak, viajaron 16 y se quedaron fuera, Álex García para que se pueda recuperar bien de la clavícula izquierda, y Cayarga, Ibón, y Óscar Ruiz por decisión técnica.

El técnico lamentó que se tengan que quedar fuera, pero recordó que esto es parte del fútbol. "Tuve que tomar una decisión, pero queda el partido de vuelta y todos ellos siguen siendo parte vital del proyecto de esta temporada. Esperemos que quede mucho más que este partido y la vuelta, y que ellos puedan ser protagonistas", señaló.

El equipo inicial es una incógnita, sobre todo del centro del campo hacia arriba incluido el jugar con uno o dos delanteros. La defensa parece la línea más clara y, junto con el portero Guillermo, pueden jugar en el lateral derecho Aitor Fernández (el reciente fichaje que debutará con el equipo), Otero, Pantiga, y Jorge Fidalgo; en el centro también parecen fijos Dudi, Jorge Sáez y Nacho Fernández; Marcos Torres entrenó durante la semana como extremo derecho; y arriba sólo es seguro Jorge Rodríguez, con Luismi y Nacho Méndez peleando por un puesto, aunque el delantero ovetense Cristian está en racha goleadora tras marcar seis goles en los tres últimos partidos, incluido un hat trick ante el Oviedo B, y el entrenador es reacio a dejarlo fuera. Completan la convocatoria, Lucas Anacker, Borja Noval, Matías y Cristian.

Lago asegura estar "encantado" de tener problemas para elegir un once porque, señaló, "eso quiere decir que todos llegaron en un gran estado de forma, y es muy difícil dejar fuera a alguien".

Ánimos de Tejero

El presidente del club, José María Tejero, envió un mensaje de ánimo a la plantilla a través del entrenador. "Les deseé suerte y que les salgan las cosas bien, lo normal en estos casos", señaló. Tejero considera que la temporada liguera "ha sido muy aceptable", pero recuerda que "lo importante y para lo que se planteó es para conseguir el ascenso".

El equipo salió del Suárez Puerta pasadas las tres de la tarde de ayer y pernoctó en Vitoria. Hoy estará arropado en las gradas por más de un centenar de aficionados, la mayoría de las peñas. El Paraguas y Orsay.