En la primera promoción de la historia de la academia recién inaugurada de Rafa Nadal, en Manacor, habrá una asturiana de 11 años. Paula Cepa González-Valdés (Oviedo, 25 de septiembre de 2004) cuenta los días para ese 19 de junio en que, por primera vez, se subirá sola a un avión en Bilbao para viajar hasta Palma de Mallorca. Un sorteo durante el Mutua Open de Madrid le permitirá formar parte del primer "Summer Camp", de una semana, con alumnos de todo el mundo. Pero, a diferencia de ellos, a la familia Cepa-González Valdés no le costará ni un euro.
Paula y sus padres no podían imaginar lo que les tenía reservado el destino cuando se tropezaron con un stand de la Rafa Nadal Academy mientras paseaban por las entrañas de la Caja Mágica, escenario del Mutua Madrid Open, a principios de mayo. Sin mucho convencimiento rellenaron un cuestionario con los datos de la niña y lo introdujeron en una urna con otros cuatrocientos aspirantes. La sorpresa les llegó unos días después, cuando una llamada telefónica les informó de que Paula era la ganadora del sorteo para participar gratis en el primer campus de verano de una semana, del 19 al 26 de junio.
La Rafa Nadal Academy by Movistar, como figura en su denominación oficial, es un proyecto espectacular que ha empezado a funcionar después de dos años de obras, concretados en unas instalaciones espectaculares: 24.000 metros cuadrados, dispuestas en forma de L, que se componen de una residencia, 26 pistas (tierra batida y "greenset", cubiertas y al aire libre), un centro de fitness, dos piscinas (cubierta y descubierta), una pista polideportiva, siete de pádel y una clínica especializada en medicina deportiva, fisioterapia y nutrición. Además, los alumnos podrán seguir sus estudios en un centro de la American International School, con clases en inglés por profesores nativos.
Todos estos servicios, durante la semana de los "Summer Camp", tienen un coste de 2.110 euros, con los gastos del viaje hasta Mallorca por cuenta del alumno. Salvo en el caso de Paula Cepa, a la que los gestores de la academia le tramitaron los billetes de ida y vuelta desde Bilbao. Un detalle más que despierta la admiración de Enrique Cepa, tan ilusionado como su hija con el acontecimiento: "El personal de la academia está en contacto constante conmigo y nos garantizan que Paula estará siempre bajo control".
En su semana intensiva en la academia, Paula Cepa recibirá 22 horas de clases de tenis, siete horas y media de preparación física y otras actividades deportivas, otras siete y media del programa de idiomas, además de "coaching" en competiciones o actividades lúdicas y recreacionales. Es probable que en algún momento aparezca por allí Rafa Nadal, pero lo que a Paula le ilusiona es aprender lo máximo posible con la raqueta en la mano.
Sin pasión de padre, Enrique Cepa asegura que en el último año Paula ha dado un estirón tenísticamente hablando. Una mejora en la que tienen mucho que ver Gonzalo Pérez Martino, director técnico de su club, el Olivares, y su entrenador, José Ramón González, "Jota". Paula Cepa dio sus primeros raquetazos con 4 años en el Centro Asturiano y a los 7 empezó a competir. Alumna del colegio de las Dominicas, le dedica unas diez horas a la semana al tenis y este año ha llegado a dos finales de torneos en categoría alevín.
Pese a que ha crecido viendo ganar a Rafa Nadal, como ídolos tenísticos Paula pone por delante a la canaria Carla Suárez y a la rusa Svetlana Kuznetsova, a las que animó desde las gradas de la Caja Mágica. Fue como un guiño del destino, que le tenía reservado a la familia Cepa-González Valdés un regalo inesperado: ir con Rafa.
