La decisión de la Federación Española de Hípica de conceder al Real Club de Polo de Barcelona la organización del Concurso de Saltos Internacional Oficial, CSIO del 2017, prueba que venía disputándose en Las Mestas desde hace 21 años, ha provocado opiniones diferentes.

Así algunos jinetes asturianos consideran que el Ayuntamiento tendría que compensar con una mayor aportación económica en premios la marcha de la Copa de Naciones para de esta manera poder convencer a las figuras que sigan viniendo a Gijón o incluso lograr la presencia de otros que habitualmente no venían.

Leonardo Medal manifestó "que el concurso de Las Mestas sea CSIO o no a la mayoría de la gente le va a dar igual, el espectáculo puede ser el mismo". No obstante reconoce que "la oficialidad tiene la ventaja de que las distintas federaciones nacionales mandan equipos de cierto nivel porque obviamente no quieren hacer el ridículo mandando representantes mediocres a un concurso cinco estrellas. Ahora será la organización del concurso la que tiene que convencer a los jinetes para que vengan".

Para Medal, uno de los habituales en la pista verde de Las Mestas, "que se mantenga el nivel del concurso va a depender totalmente de que el Ayuntamiento sepa 'pescar' jinetes y eso prácticamente solo se consigue con la cuantía de los premios".

De similar opinión es Julio Arias, uno de los habituales componentes del equipo nacional. El asturiano lamenta "que Gijón se quede sin Copa de Naciones porque particularmente es una prueba que me gusta mucho". Sin embargo reconoce que "para la mayor parte de la gente que acude cada verano a Las Mestas la Copa de Naciones no es una prueba tan atractiva ya que se corre a un horario nada habitual, es muy larga y condiciona mucho el tema de apuestas".

Arias está convencido de que el concurso gijonés no sea el oficial de España "no tiene porque influir en el nivel del espectáculo". Para el jinete "es vital que el Ayuntamiento consiga que se mantenga en la categoría cinco estrellas". Al igual que su compañero Leonardo Medal "si desde la organización se aumenta el dinero destinado a premios el nivel del concurso puede incluso ser superior porque podrían venir mejores jinetes".

Mucho más crítico se mostró el nuevo presidente del Club Hípico Astur y criador de caballos Jesús Kocina que considera la decisión federativa como "económicamente terrible y deportivamente lamentable para Gijón".

"Creo que en Gijón la mayor parte de la gente nunca fue consciente de lo que significa albergar un CSIO. Aquí ir al hípico se toma como una fiesta sin darle mucha importancia el nivel deportivo" considera Kocina para quien "lo sorprendente es que nos haya durado tanto". El nuevo presidente del Chas afirma que "Asturias cada vez apuesta menos por el mundo de la hípica lo que es una verdadera pena". E incluso advierte de las voces que se levantan desde algunas formaciones políticas para que Gijón deje aportar dinero al concurso hípico.

Jesús Kocina señala que "la marcha del CSIO es una mala noticia para la gente de la hípica, lo que no tengo tan claro es que lo sea para la gente en general".