Algunos sectores del barcelonismo se plantean la posibilidad de poner en marcha algún tipo de mecanismo para frenar el pacto alcanzado por la junta directiva del Barcelona con la Fiscalía y que exonera de cualquier tipo de responsabilidad al actual presidente barcelonista, Josep Maria Bartomeu, y al anterior, Sandro Rosell.

En la última reunión de la directiva azulgrana, el pasado lunes, el equipo dirigente aprobó por catorce votos a favor, dos en contra y dos abstenciones el pacto al que los servicios jurídicos de la entidad azulgrana han llegado con la Fiscalía y la Abogacía del Estado, un acuerdo según el cual el club admite dos delitos fiscales contra la Hacienda Pública por el caso Neymar en 2011 y 2013.

Además el club acepta pagar una multa de 5,5 millones de euros. Esta actuación ha sido cuestionada desde algunos sectores del barcelonismo, especialmente el expresidente Joan Laporta, el excandidato en las últimas elecciones Toni Freixa y también el grupo Manifest Blaugrana.

La posibilidad de poner en marcha una moción de censura es muy compleja, debido al cambio estatutario al respecto. Los impulsores de una moción de censura necesitarían recoger el equivalente al 15% del censo en firmas (entre 15.000 y 20.000) y que tendrían que reunirlas en 15 días para llevar a cabo la misma.