A lo largo de la temporada el Caudal se ha mostrado como un conjunto sólido y muy complicado de batir, llegando a situar en doce tantos el récord histórico de tantos recibidos en una campaña completa en la Tercera División asturiana pero es que en esta promoción ha vuelto a demostrar su solidez. El equipo que entrena Iván Ania acumula cuatro encuentros consecutivos imbatido en esta fase de ascenso llegando a los 360 minutos consecutivos sin recibir goles.

La estrepitosa derrota del primer encuentro ante el Boiro cuando cayeron por 2-0 ha significado un punto de inflexión para los caudalistas. Aquella mala tarde de Barraña en la que los mierenses recibieron dos tantos hizo que el cuadro coruñés acabara de encarrilar el ascenso directo a Segunda B pero además fue el inicio de una nueva racha de imbatibilidad mierense. Aquella tarde Bussman recibió los que son, hasta la fecha, sus dos únicos tantos en todos los "play-off". Romay, en el minuto 32, y Borja, en el 94, son los únicos que han conseguido batir al muro alemán.

Desde Barraña los de Ania han vuelto a ser el equipo efectivo que, agrupados en torno al balón, no han vuelto a recibir tanto alguno. En el duelo de vuelta contra el Boiro los mierenses vencieron por 1-0 con un gol de Iván Fernández quedándose a las puertas de forzar la prórroga pero fue el inicio de una racha que les puede llevar al ascenso.

En la segunda ronda les tocó el Cayón al que vencieron por 0-2 en el Fernando Astobiza con un tanto en propia meta de Víctor Fernández y otro de Quero, y en la vuelta les volvieron a doblegar con un gol de Javi Sánchez.

El pasado domingo visitaron al Haro en la ronda final y volvieron a vencer por 0-2 con goles de Javi Sánchez y Quero y volviendo a dejar su meta imbatida llegando a los cuatro partidos consecutivos sin recibir que podría coronarse el sábado sellando el regreso a Segunda B.