París, L. M. PASCUAL

Dos días después de que los británicos votaran abandonar al Unión Europea, Gales o Irlanda del Norte garantizan la presencia de una selección británica en los cuartos de final de la Eurocopa, un torneo que nunca antes habían disputado y en el que son dos de las sensaciones.

Los galeses de Gareth Bale rebosan optimismo tras haber acabado primeros de grupo, superando a la vecina archidominante Inglaterra y con su estrella como único futbolista que ha marcado en los tres partidos y que comparte con el español Morata la condición de máximo goleador del torneo. Por su parte los norirlandeses, que lograron el pase para octavos con solo tres puntos, cuenta con la solidez de su bloque y evita ponerse en manos de las individualidades, ahí donde Gales se ha echado en brazos de Bale.