El último fin de semana de competición en el fútbol español ha servido para trazar por completo el mapa de la Segunda División de cara a la próxima temporada. El Cádiz y el Sevilla Atlético han sido los dos últimos equipos en incorporarse a una división que gana algo de peso hacia el sur. La Segunda tendrá además al UCAM Murcia y al Reus desde Segunda B y recibe a Rayo Vallecano, Getafe y Levante de la máxima categoría. El Oviedo ya sabe los 21 rivales con los que competirá en una temporada que significará el estreno de Fernando Hierro en los banquillos.

El saldo de ascensos y descensos hace que el mapa de Segunda se equilibre un poco. El Oviedo perderá hasta cuatro desplazamientos relativamente cómodos para una afición habituada a viajar. El descenso de la Ponferradina es el ejemplo más claro: 217 kilómetros separan la capital asturiana de Ponferrada. Similar situación se da con la caída a Segunda B del Bilbao Athletic, con San Mamés a 282 kilómetros de distancia. También contó con amplia presencia de aficionados carbayones los partidos disputados en los estadios de los tres recién ascendidos: Alavés (Vitoria está a 342 kilómetros). Osasuna (Pamplona, a 435 kilómetros) y Leganés (453 kilómetros). Las otras dos ciudades que se quedan sin vista azul significaban un desplazamiento más complicado: Albacete y Llagostera.

El mapa de Segunda cambia de forma sensible con el cambio de categoría de los dos equipos vascos, el navarro y el del Bierzo y la llegada a la competición de equipos andaluces y del levante del país. El Oviedo deberá viajara a Andalucía esta campaña en cuatro ocasiones, dos más que en la anterior, por los ascensos del Cádiz y del Sevilla Atlético. Además, Almería y Córdoba se mantienen en la categoría. Otro viaje lejano será el que haga el equipo carbayón a Murcia (850 kilómetros) para enfrentarse al UCAM.

Cataluña ya había sido una comunidad visitada frecuentemente por los azules la última temporada, para enfrentarse al Girona, al Llagostera y al Nàstic. Se elimina el Llagostera ahora del mapa de Segunda pero aparece el Reus, en su estreno en la "División de Plata". Los descensos incluyen un viaje a Valencia para jugar ante el Levante, otro a Getafe y uno más a Madrid, para enfrentarse al Rayo Vallecano.

En cuanto a la designación de los favoritos parece precipitado a estas alturas, cuando los equipos aún están iniciando el camino en la construcción de sus proyectos. Los equipos descendidos de Primera siempre suponen una amenaza y equipos con solera como Valladolid, Zaragoza o Mallorca anuncian proyectos importantes. Nàstic, Girona y Córdoba, que entraron en play-off también quieren luchar por todo.