El Real Avilés ya tiene cubierta su portería para la temporada. El club se hizo ayer con los servicios del guardameta Carlos Castro, que todavía tiene por delante un año más como juvenil a sus 18 años, pero luchará por su hueco en el primer equipo. "Cuando me llamó José Luis Tamago me hizo mucha ilusión. Yo no sabía que el Avilés se había fijado en mí. Me llevé una gran sorpresa", sentencio el jugador ayer, tras hacerse público su fichaje. Se trata de otra apuesta de futuro por parte del club blanquiazul, con el que ha firmado por tres temporadas.

"Tengo muchas ganas de empezar a entrenar ya. Tengo ganas de trabajar y de demostrar que puedo ser el portero del Avilés", sentenció el joven jugador. Carlos Castro tendrá que luchar por estar en el once con otros dos guardametas, pero cuando lo consiga será su debut en Tercera División. "Es increíble que pueda llegar a debutar en un equipo que aspira a lo máximo, que estará luchando por ascender", señala el jugador. El portero llega procedente del Oviedo juvenil, donde fue convocado con el filial en varias ocasiones pero no llego a jugar, y antes ya había jugado en el Veriña en la misma categoría, dejando atrás su pasado en la cantera del Sporting.

El joven portero no será una excepción esta temporada en la plantilla blanquiazul. Sus dos compañeros en la posición, Lucas Anacker, que firmó en invierno de la pasada campaña, y Esteve Peña, que firmó hace unos días y llega del Valencia juvenil, tienen también 18 años. "Somos tres porteros muy jóvenes, no es normal que un equipo como el Avilés cuente con una meta con sub 23, pero se agradece la confianza que han puesto en mí", afirma Carlos Castro.

La experiencia de defensas como Pantiga, Nuño, Pablo Suárez o Marcos Torres, se suman a las ganas de trabajar de los jóvenes porteros para hacer del Avilés un equipo que encaje poco, algo que el técnico Pablo Lago considera importante para poder luchar por el campeonato. "Es un gran paso para mí. Son gente que no solo ha jugado en Tercera y sé que puedo aprender mucho. Seguro que me ayudan a entender algunas circunstancias del juego que todavía se me pueden escapar", afirmó el portero.

Una vez recibida la llamada del Avilés, las cosas vinieron rodadas para Carlos Castro: "La verdad que fue una negociación rápida. Es una gran oportunidad para mí y las dos partes estábamos en la misma sintonía. Solo hubo que arreglar unos flecos", explicó el portero.

Todavía no conoce a Pablo Lago ni a sus nuevos compañeros, pero afirma que tiene ganas de adaptarse al equipo: "Creo que no habrá mayor problema. Hay que llegar y trabajar mucho, así las cosas no tienen porqué ir mal. Me han hablado muy bien de Pablo Lago, que es un buen entrenador, y creo que todo va a ir bien", sostiene Carlos Castro.

A vueltas con el centro del campo. El club estaba a la espera de una respuesta de Guillermo, que había aplazado su decisión por motivos laborales, pero parece que con este tercer portero ha cerrado otra de las posiciones de la plantilla. "Tenemos tres porteros jóvenes con muchas ganas de trabajar y de pelear por un hueco, creo que es una buena decisión", señaló ayer Tamargo, encargado de confeccionar la plantilla junto al cuerpo técnico. La prioridad está desde hace unos días en encontrar dos centrocampistas para completar el equipo, uno creador y uno defensivo, unos refuerzos que siempre estuvieron en boca del club durante la pasada campaña.