El Caudal Deportivo presentó en la tarde de ayer a sus dos primeras incorporaciones de este mercado de fichajes: el mediocentro Beto y el defensa Colo. Ambos llegan al Hermanos Antuña ilusionados por defender la camiseta del conjunto mierense en la temporada del regreso a la categoría de bronce.

Los dos primeros fichajes caudalistas vienen en circunstancias diferentes. Beto acumula experiencia en Segunda B mientras que Colo será debutante en la categoría. "Será mi cuarta campaña en la división de bronce, pero llego muy ilusionado a un equipo recién ascendido y dispuesto a ayudar para lograr la permanencia", admite el mediocentro de Guinea Bissau. Por su parte, el central asegura tener "muchas ganas de jugar en estadios grandes y ante equipos históricos que militan en esta categoría".

Uno de los principales del fichaje de Colo ha sido el entrenador Iván Ania. El central coincidió con el técnico ovetense en las filas del Oviedo B. "Sin él, quizá no habría surgido este interés del Caudal por mí; fue un técnico muy importante", explica el nuevo jugador caudalista.

El defensa admitió que puede acoplarse tanto al eje de la zaga como al flanco zurdo. "Mi posición natural es la de central, pero en las últimas temporadas vengo disputando algunos partidos como lateral", apunta.

Menos dudas existen con Beto. El de Guinea Bissau se define como "un futbolista corpulento que trata de jugar fácil el balón, sin complicaciones". El jugador ya estuvo en la órbita del Caudal durante el pasado mercado invernal, cuando militaba en las filas del Arenas de Getxo. Por aquel entonces, el fichaje no fructificó, pero la llamada de los caudalistas en los últimos días ha hecho posible la operación: "La decisión fue muy fácil", destaca el centrocampista defensivo del Caudal, que cuenta en su palmarés con la conquista de dos Copas del Rey de categoría juvenil, cuando militaba en la cantera del Sevilla.

El siguiente en llegar podría ser Chechu Grana. El cancerbero tiene muchas opciones para ser el siguiente jugador en firmar por el equipo mierense. Tras desvincularse del Sporting en la tarde de ayer, el portero ya se ejercitó a las órdenes de Iván Ania. Chechu Grana ya fue jugador del Caudal en la pasada campaña en calidad de cedido por parte del equipo rojiblanco. El cancerbero defendió la meta en diez ocasiones y recibió tres tantos.