La selección brasileña de fútbol conquistó el oro olímpico al imponerse en la tanda de penaltis a Alemania en la final de Río de Janeiro celebrada en el Estadio de Maracaná, único título que le faltaba a la 'canarinha' y que llegó con la firma de Neymar, quien rubricó un gran torneo haciendo el tanto de la final (1-1) y el penalti decisivo (5-4) para la anfitriona. El "10" brasileño rompió en lágrimas al dar a su país un histórico oro, más si cabe por hacerlo en casa, en un Maracaná deseoso de alegrías. La pentacampeona del mundo aún se cura de la herida de "su" Mundial en 2014, pero la conquista olímpica devuelve a Brasil parte de su trono perdido, con Neymar como auténtico "O Rei". "Respondimos a las críticas con fútbol", dijo el barcelonista con el oro al cuello.