La haltera berciana Lydia Valentín, bronce en los pasados Juegos Olímpicos de Río, confirmó que reclamará "daños y perjuicios" por recibir con varios años de retraso las medallas de Londres -oro- y Pekín -plata- al detectarse que algunas rivales que la superaron se doparon.

"Es vergonzoso que se haya producido algo así y, una vez que se cumpla el periodo estipulado de reclamación por parte de los deportistas -60 días- y el Comité Olímpico Internacional (COI) confirme oficialmente las clasificaciones de estos Juegos, daremos los pasos necesarios para que se me restituya en lo que es mío y de mi deporte", aseguró a la gencia Efe.

De hecho, ha recalcado que la halterofilia española se ha visto "muy perjudicada por estas situaciones, ya que no ha podido tener el protagonismo que habría ganado, ni disponer de los recursos que hubiera obtenido para poder realizar entrenamientos de mayor calidad".

Respecto a la cuantía que podría exigirse, previsiblemente a través del Comité Olímpico Español (COE), dando traslado al COI para que éste actuara ante las Federaciones afectadas por los casos de dopaje, Lydia Valentín ha señalado que "es difícil de saber la cantidad, pero habrá que cuantificarlo porque este deporte no es el fútbol u otros mayoritarios" y los deportistas viven de las becas, ha dicho.

Lydia Valentín está pendiente de recibir la medalla de oro de Londres 2012 tras detectarse tres casos de dopaje en las halteras que le impidieron subir al podio y hoy mismo le han comunicado que cuatro años antes, Pekín 2008, también se habrían detectado los presuntos casos de dopaje de la china Li, la kazaja Veznihina y la rusa Yevstyukhina.

La deportista leonesa ha reconocido sentirse "por un lado contenta, pero por otra indignada y triste porque se ha vuelto a demostrar que hay gente que juega con los valores del olimpismo", ha dicho.