Adolfo Pulgar regresaba ayer al campo del equipo que entrenó las dos pasadas temporadas y consiguió sacar un punto de uno de los campos más complicados de la categoría. Y eso que fueron los de Chuchi Collado los que dispusieron de las mejores ocasiones del partido. Fue un partido de ida y vuelta en el que el portero local tuvo poco trabajo.

En la primera parte reinó la igualdad, con muchos balones en largo y muchas disputas. Las ocasiones claras fueron para el Tuilla. El primer disparo del Marino fue en el minuto 41 cuando el Tuilla ya había creado varias ocasiones. El equipo local dispuso de varios centros al área que no consiguieron rematar con claridad ninguno de sus delanteros. Justo antes del descanso, un error entre el defensa del Marino y Davo casi provoca que Ponte rompiese el empate, pero el portero corrigió a tiempo su error.

En la continuación el partido siguió el mismo guión. En el 53 Davo tuvo que aplicarse a fondo para evitar que abriera el marcador el Tuilla. A falta de media hora para el final llega la ocasión más clara en un penalti que le hacen a Piniella. Lo tira Kike Fanjul y Davo lo detiene en una buena estirada. El Marino parecía que quería reaccionar y tuvo un poco más de ímpetu durante unos minutos hasta que Chicho Villanueva volvió a meter el miedo en el cuerpo del conjunto luanquín. El partido terminaría con una ocasión clara para el Marino.