La derrota en el derbi contra el Lealtad trajo consigo más malas noticias al margen de no haber podido sumar tres puntos. Iván Ania se queda sin el mediapunta Ernesto durante los próximos dos meses al fracturarse la clavícula.

Los aficionados blanquinegros que el pasado domingo presenciaron el duelo entre mierenses y maliayos en el Hermanos Antuña se temían lo peor cuando vieron caer al granadino en la segunda parte en un lance fortuito con la zaga del Lealtad. El jugador se levantó con el brazo izquierdo prácticamente inmóvil pero en un arrebato de rabia y amor propio siguió sobre el terreno de juego pese a las evidentes muestras de dolor. Es más el jugador dispuso de una buena ocasión para empatar pero su disparo se fue por encima de la meta de Javi Porrón. Al término del derbi ya el técnico mierense, Iván Ania, se temía lo peor aunque confiaba que el alcance de la lesión fuera lo menor posible. Pues las pruebas médicas a que fue sometido la mañana de ayer confirmaron lo peor. Padece una fractura de la clavícula de su hombro izquierdo por la que tendrá que estar de baja unas ocho semanas. Eso sí, Ernesto confía en poder acortar esos plazos y regresar antes del mes de noviembre.

Esta no será la única baja para el duelo de mañana, 17.45 horas, ante el Lleida en el Hermanos Antuña en la segunda ronda de la Copa del Rey pues Beto tampoco estará. El pivote disputó el domingo con la selección de Guinea-Bissau un duelo de clasificación para Copa de África ante el Congo y en el club aún no sabe cuando regresará pero lo que es seguro es que no jugará mañana.

Los que tampoco tienen asegurada su presencia son los "tocados" Armando Invernón y Javi Sánchez. El primero aún no se ha estrenado este curso mientras que el segundo se lesionó en Liga ante el Burgos y no ha participado en los dos últimas choques pese a que ha entrado en la lista de convocados.