"Venimos casi todos los años porque nos gusta. Vas tranquilo, sin mucha dificultad, y se hace bien". Lo explicaba Eulogio Martínez González, de Avilés, ayer, pocos minutos antes de iniciar la XXI Clásica "Los Puertos Esmeralda". Se encargó de inaugurarla, cortando la cinta, el homenajeado de este año, Jesús María Fernández Jardón, gerente de Tartiere Auto. Le ayudó en tal misión el presidente del club organizador, Nava 2000, Mario Iglesias, y el alcalde, Juan Cañal.

Con ganas de pedalear también llegó a Nava un amigo de Eulogio Martínez. Venían concretamente de Salinas y Campo de Corvera. José Ángel Blanco Méndez destacó el paisaje, por "guapo", además, cree que ahora, en septiembre, "es una buena época para hacer una marcha de éstas". Eulogio Martínez reconoce que aunque es un recorrido bastante asequible para quien está de pedalear, "se sufre sobre todo en el último alto, El Arbeyal, que es una rampa de unos cuatro kilómetros".

Son muchas las razones que hacen que quien prueba "Los Puertos Esmeralda", repita. Es el caso del gallego, de Coruña, José Antonio Lado "Toto", para quien la de ayer era su duodécima marcha. Le atraen "la fiesta, que es la última de la temporada, que haces muchos amigos, muchos contactos con la gente...". Con todos estos motivos logró convencer a su amigo Antonio Villena para que participara por primera vez en esta clásica, aunque eso le supusiera viajar desde Barcelona. Su afición a la bicicleta les unió desde niños. Aunque, como ambos comentaron, venían "de los extremos" de España, hubo quien llegó aún más lejos. Y para agradecer el esfuerzo, la organización reconoció a un participante belga, otro norteamericano y dos ingleses.

Al avilesino Rubén Nicieza no le frena la edad y a sus 86 años se subió a la bicicleta para recorrer los 115 kilómetros de la marcha con una altitud acumulada de 1.750 metros. Por lo que la organización también le reconoció, al igual que al participante más joven, que fue el naveto Yeray Díaz Martínez.

En esta vigésima primera edición de "Los Puertos Esmeralda" participaron unos 450 cicloturistas, explicó Mario Iglesias, que valoró con un "muy bien" el transcurso de la marcha, aunque hubo alguna caída leve, y de la jornada, que finalizó con la entrega de premios y regalos junto al Ayuntamiento, donde se instaló la salida y meta de la prueba.